NUEVA TENSIÓN. Trabajadores de una compañía multinacional reparan una antena en un edificio de Bagdad. E.U.A. enfrenta críticas internacionales por excluir a varios países del proceso de reconstrucción en Iraq. Bush defiende castigo a países opositores a guerra
Washington/Agencias
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El presidente de E.U.A. espera que los países excluidos de los contratos perdonen la deuda iraquí.


 

Los contribuyentes entienden por qué tiene sentido que los países que arriesgaron la vida de sus soldados participen en los contratos para la reconstrucción de Iraq.”

George Bush,
Pdte. E.U.A.

 
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, defendió ayer la decisión de su gobierno de excluir de la reconstrucción de Iraq a quienes se opusieron a la guerra.

A pesar de las críticas internacionales por su decisión, el presidente estadounidense reiteró que los contratos de su país para la reconstrucción de Iraq, por valor de 18,600 millones de dólares, sólo se adjudicarán a las naciones de la coalición en Iraq.

“Lo que quiero decir es que, cuando se trata del gasto del erario público... el pueblo estadounidense y los contribuyentes entienden por qué tiene sentido que los países que arriesgaron la vida de sus soldados participen en los contratos para la reconstrucción de Iraq”, dijo Bush.

El mandatario agregó, sin embargo, que los países excluidos —entre ellos Francia, Alemania y Rusia— accedan a perdonarle la deuda a Iraq.

“Sería una ayuda importante por la cual estaríamos muy agradecidos”, declaró Bush a reporteros después de una reunión de gabinete.

Posponen licitación

El Pentágono, por su parte, postergó una conferencia de interesados en contratos para la reconstrucción que estaba programada para ayer.

En su sitio en internet, el Pentágono negó que la reunión —reprogramada para el 19 de diciembre— haya tenido relación alguna con las críticas a la decisión de la Casa Blanca de excluir a varios países del proceso de reconstrucción.

Quejas por contratos

El proceso de reconstrucción también es cuestionado por aliados y por el Pentágono.

Una auditoría del Pentágono demostró que una filial del grupo Halliburton infló los precios de la gasolina exportada a Iraq.

El vicepresidente Dick Cheney estuvo vinculado anteriormente a dicha empresa que repara la red de oleoductos.

El contrato a Halliburton fue dado sin licitación previa.

Los aliados, por su parte, se quejan de que no ven recompensa por sus esfuerzos en Iraq.

Los dirigentes polacos, por ejemplo, habían confiado en que los contratos ayudasen a estimular el lento crecimiento económico de su país.

En el caso de España, ninguna de sus compañías ha ganado contratos importantes para la reconstrucción.