ASESINATOS. Un pistolero iraquí custodia una puerta ensangrentada en el sitio donde ayer en la madrugada fueron asesinados al menos 10 soldados de la coalición luego de que un grupo de chiitas les tendiera una emboscada, según la versión de Estados Unidos. El atentado ocurrió en la ciudad de Karbala.
Alerta máxima en cuartel Camp Baker
Los mandos de Camp Baker han restringido las salidas del cuartel. Únicamente las patrullas pueden salir del lugar.
   


Camp Baker, la base militar donde están apostados los salvadoreños, se convirtió en un hormiguero ayer por la madrugada. A partir de las 2 de la mañana, soldados estadounidenses entraban y salían de las cuadras entre gritos de “you have five minutes” (tienen cinco minutos) y golpes de puerta.

Decenas salieron armados y uniformados a las patrullas militares y pocos sabían en realidad lo que pasaba.

Todos los vehículos fueron encendidos y las armas montadas. Había una emergencia. Acababa de llegar la solicitud de refuerzos desde Karbala y la noticia de los tres soldados estadounidenses asesinados en esa ciudad.

El batallón Cuscatlán se puso también en alerta, después de un día que, de por sí, terminó tenso: habían corrido rumores de la presencia de Sadam Husein en las cercanías de Kufa, algo que nadie dijo tomarse en serio, pero que a todos preocupó.

Aunado a eso, era escasa la visibilidad en los patrullajes tras una tormenta de arena en la noche más pesada de la semana. Era jueves, y había tráfico en las calles debido a una gran cantidad de bodas y balazos sonando por la ciudad.

Una vez que amaneció, según versiones estadounidenses, dos aviones F-16 comenzaron a sobrevolar Karbala y Nayaf, y elementos de tres divisiones destacadas al norte de Bagdad comenzaron a bajar hacia la región chiita.

Salidas canceladas

Los estadounidenses cancelaron todas las salidas del campamento que no fueran estrictamente de patrullajes militares, mientras las unidades salvadoreñas redoblaron los suyos.

La multiplicación de las tensiones en la zona ha redoblado la seguridad y la alerta roja comienza a volverse frecuente. Sin embargo, fue la masiva manifestación de ayer la que, paradójicamente, cambió los ánimos y pareció permitir el retorno de la normalidad. El hecho de que la protesta fuese pacífica y sin percances lo permitió.

Nayaf se calienta

Los acontecimientos en Karbala, iniciados por seguidores de líderes religiosos que residen todos en Nayaf, han cambiado la situación local, y la tensión es notable tanto en las tropas como entre los civiles que trabajan aquí.

Al cierre de esta edición, patrullas militares salvadoreñas habían salido del campamento a investigar unas explosiones escuchadas cerca de Kufa.

Tanto los soldados salvadoreños como los hondureños, sin embargo, parecen estar más tranquilos que sus similares estadounidenses. Hasta el momento la brigada Plus Ultra no ha sufrido ninguna baja en combate, y los ataques parecen dirigirse hasta hoy contra las fuerzas estadounidenses.


 

ACAC