ÁLBUM DE CAMPAÑA. Algunos soldados miembros del batallón Cuscatlán posan para la foto en el Camp Baker, ubicado en Nayaf.

 

Centroamericanos esperan equipos

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Los del desierto

Los soldados de Estados Unidos y las tropas extranjeras en Iraq portan un uniforme beige.

Para camuflarse en el desierto, los soldados apostados en Iraq portan un uniforme con colores claros, cafés, beiges y blancos. Así están vestidos estadounidenses, españoles, británicos, ucranianos y polacos, de acuerdo con los cánones militares de la región.

Los salvadoreños

El batallón Cuscatlán llegó a Iraq con un uniforme verde que está imponiendo moda.

Las tropas nacionales llevan el uniforme militar oficial del país, verde y apto para zonas tropicales y boscosas. “Así nos sentimos bien”, dice el coronel Monterroza. El color tiene una ventaja: todo el mundo los distingue de los otros contingentes presentes en la región

 

SEPTIEMBRE 13. Los más de 1 mil 100 soldados centroamericanos desplegados en Iraq no poseen los equipos fundamentales para realizar la labor que les fue asignada en las provincias de Nayaf y Al Qadisiya, explicaron este viernes responsables de la brigada hispanocentroamericana Plus Ultra, bajo mando español.

“Los nicaragüenses y dominicanos en Diwaniya no recibieron nada de lo prometido: ni equipos considerados fundamentales como vehículos y equipos de transmisión ni accesorios como botas y uniformes”, criticó ayer el comandante español Vicente González, encargado de la logística de la brigada.

Además, los hondureños y salvadoreños sólo recibieron cerca del 60% de lo prometido y gran parte está “averiado, antiguo o en mal estado”.

El jueves, el general Ricardo Sánchez, de E.U.A., admitió que la entrega de los equipos prometidos a las tropas centroamericanas está atrasada, pero negó que ello esté afectando sus actividades.

Pero según los españoles, la precariedad de los equipos de los centroamericanos hace que sus batallones sean completamente dependientes.


“Aquí todos somos hermanos de armas y la culpa no es de nadie. La decisión se toma en otros ámbitos políticos”, explicó el comandante español Jesús Sanjurjo.

“Los pintamos de verde”

Ayer, en la base Santiago donde permanecen parte del batallón español y el batallón salvadoreño, se recibieron una veintena de vehículos blancos, tipo todo

terreno. “¡Los pintamos de verde y nos los quedamos!”, bromeaban los salvadoreños, que desconocían a quién estaban destinados los automóviles.

“La Plus Ultra no tiene las condiciones para asumir su misión. En Diwaniya recibimos el control y la entrega de material de E.U.A. no se ha cumplido. No puede pasar lo mismo en Nayaf”, explicó González.

En la opinión del coronel Monterroza, sus hombres han recibido el material suficiente para comenzar a trabajar, como transportes y equipos de transmisión: “Pero por ahora estamos patrullando con los estadounidenses. No hemos asumido el control de la ciudad ”.

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