Oscura la hora del esperado estreno. Cientos de salvadoreños, jóvenes los más, se dieron cita ayer a las cero horas para disfrutar de la segunda parte de “Matrix”.

Los lustrosos pasillos de Cinemark de Metrocentro se vieron totalmente abarrotados, incluso una hora antes de la cita, de jóvenes y adultos de todas las edades, aunque fueron los jovencitos los ganadores en cuanto a presencia masiva respecta. Y aunque algunos acompañaban al amigo y otros fueron sólo presa de los medios, una gran cantidad de ellos permanecía con el corazón encendido al no poder creer que serían de los primeros afortunados en ver “Matrix reloaded”, ya toda una película de culto.

Las colas parecían interminables y el mar de rostros levantaba con fuerza su oleaje cada vez que el de adelante le daba chance al amigo para que obviar la fila.

“Hey, hey, hey, qué ondas ahí. No los dejen pasar”, era alguna de las voces que poco a poco se enardecían ante el atrevimiento de otros.

Preparados

Fueron seis las salas habilitadas para el estreno en Metrocentro y, según comentó Soraida Martínez, gerente de los cines, “se esperaba la presencia de alrededor de 1 mil 100 personas para el estreno de ‘Matrix’ ”. Pero según un recuento final, fueron 1 mil 800, informaron fuentes de la compañía.

Pero aunque las medidas fueron previamente advertidas y el espacio era quizá suficiente para la ocasión, lo cierto es que poco a poco la turba se desesperaba más por entrar, hasta el punto que la gerente tuvo que hacer gala de su voz de mando para caldear los ánimos.

Pronto la gente empezó a ingresar al recinto de la “Matrix”, y ahí sí que habría que guardar silencio, pues el Elegido y su milagro enmudecerían a cualquier lengua.

Más adultos

A escasos minutos de la cita, en las salas de Multicinema Galerías, la historia era distinta: aquí los jóvenes se mezclaban con los adultos.

Sólo una sala fue habilitada para la película en este sitio, e iniciado el filme aún faltaban lugares por llenar. Los rostros, extrañamente, eran más variados, pues las edades adultas también levantaban bandera para mostrar sus gustos contemporáneos.

“Matrix reloaded” inició con el destello de siempre, con su fuego fuera de los conceptos de tiempo y demás. Y los humanos fueron conectados al sistema.