El fiscal general de Colombia, Mario Iguarán, investiga si los extranjeros mencionados en los correos de las FARC han cometido delitos como terrorismo, financiación de terrorismo o conspiración para delinquir
Colombia confirma la autenticidad de todos los correos de las FARC que mencionan a El Salvador, a “Ramiro” y al FMLN. Su Fiscalía, además, revela que hay un proceso de investigación preliminar abierto que incluye a “Ramiro salvadoreño” y a ciudadanos de otros países mencionados en las comunicaciones.
El jefe fiscal antiterrorismo es el principal responsable de la indagatoria que el Ministerio Público colombiano ha abierto, tras conocer los correos que el ejército de este país se incautó de la computadora de “Raúl Reyes”, el segundo al mando de las FARC. Las posibilidades de delito que esa unidad contempla, por la información revisada hasta ahora, incluyen terrorismo, rebelión, tráfico de armas y lavado de activos, entre otros.
Mario Iguarán, el fiscal general de Colombia, asegura que si la investigación demuestra participación activa de extranjeros en vínculos con las FARC, sobre todo en delitos extraterritoriales como el terrorismo o colaboración con el terrorismo, pedirá su extradición (ver entrevista).
“Partimos de que lo que está en esos correos ha sido verificado y avalado. INTERPOL avaló que no habían sido manipulados, como también lo hizo un juez de garantías colombiano”, recalca.
Es Iguarán quien, en grabación, se encarga de lo que su institución contempla hacer en casos como el de Ramiro en un futuro. “En el caso de las FARC, un grupo terrorista, cualquier ayuda, auxilio, vínculo injustificado por parte de un ciudadano extranjero nos permite vincularlo a una investigación y utilizar la herramienta de la extradición”, dice.
“Ramiro”, como ha publicado este periódico, es el seudónimo que José Luis Merino, actual miembro de la Comisión Política del FMLN utilizó durante la guerra civil salvadoreña. Una investigación periodística de este medio reveló, además, que los movimientos migratorios de Merino coinciden con las fechas en que “Ramiro” es nombrado en encuentros internacionales en los correos de las FARC.
La Fiscalía Antiterrorismo de Colombia aclara que por el momento no puede asegurar si “Ramiro” es José Luis Merino, ya que, aseguran fuentes de esa institución, eso es tarea de sus homólogos salvadoreños. “Por el momento no hay un expediente penal abierto contra ningún ciudadano extranjero en particular... hay indagatorias sobre todos los que aparecen mencionados en las comunicaciones”, aseguró un jefe fiscal colombiano.
En estos momentos, hay, en Bogotá, un equipo de tres fiscales salvadoreños ampliando las investigaciones que ya inició Colombia (ver nota aparte).
solidaridad y armas
En el caso particular de El Salvador, la investigación colombiana se centra, por ahora, en el inicio de las relaciones entre las FARC y el FMLN en 2001, cuando un grupo dirigido por “Ramiro” organizó un evento de solidaridad.
Un investigador fiscal que trabaja específicamente en los papeles relacionados con El Salvador aseguró que aquella reunión pudo ser un primer contacto, que luego derivó en relaciones criminales. “De esas reuniones salieron contactos que luego seguramente sirvieron para hacer otro tipo de negociaciones, que no eran políticas”, dijo. Otro fiscal antiterrorismo da indicios sobre el perfil último de la indagación colombiana: “Se vislumbra una posible negociación de armas entre las FARC y ciudadanos de otros países”.
Estas fuentes explican que, a finales de los noventa e inicios de 2000 —al final de la presidencia de Andrés Pastrana, en la que hubo un proceso fallido de paz que le dio un territorio a la guerrilla—, las FARC iniciaron una estrategia de apertura internacional orientada a conseguir dinero y reconocimiento. Esta tesis coincide con la de la Corporación Nuevo Arcoiris, uno de los tanques de pensamiento colombianos mejor informados sobre las FARC: “Para 2002 las FARC tienen 73 frentes guerrilleros en Colombia y empiezan una campaña de relaciones internacionales, que se intensificaría luego”, afirmó el analista Ariel Ávila.
Las fuentes fiscales hablan de “varios cancilleres” de las FARC en América Latina en esos años. Había, dicen, un grupo importante en México, dirigido por dos personas, una de sobrenombre “Aleyda” y otro de alias “Marco”. Son ellos dos, de hecho, quienes firman varios de los correos en que informan al secretariado de las FARC sobre la actividad de 2001 en El Salvador. “Marco” escribe a Raúl Reyes, por ejemplo, sobre la oficina que la guerrilla colombiana montó en San Salvador aquel año.
Ya para la segunda mitad de esta década, según la Fiscalía colombiana, las relaciones internacionales de las FARC se habían extendido a varios países del continente y alcanzaban negocios mucho más graves que la propaganda. “En Paraguay, por ejemplo, estaba el partido Patria Libre, que tenía un brazo armado y que según los correos planificó con ayuda de las FARC varios secuestros, entre ellos el de la hija de un ex presidente”, dice una fuente fiscal.
La indagatoria relacionada a El Salvador también contempla delitos de mayor envergadura, como el secuestro. “Ya las FARC estaban hablando a otros agentes de cómo ejecutar lo que ellos sabían hacer”, comentó un fiscal relacionado con el expediente salvadoreño, quien asiente con la cabeza para confirmar la línea de investigación según la cual el golpe planeado por las FARC y un grupo del FMLN en 2002 en Panamá es, en realidad, el secuestro de un ciudadano estadounidense, algo que también manejan fuentes salvadoreñas relacionadas con la investigación.
Foto de La Prensa / Óscar Leiva. En riesgo. Henry Navarrete se protege de la lluvia en la comunidad Las Victorias en el bulevar del Ejército donde viven miles de familias.
"Hay que determinar si es procedente una investigación formal", Mario Iguarán, fiscal general colombiano
La Comisión Nacional de Seguridad hizo el análisis de los correos.
A la FiscalíaRené Figueroa, ministro de Seguridad, dijo ayer que un equipo jurídico detectó que efemelenistas habrían cometido una decena de delitos, por lo que ahora corresponde a la Fiscalía.
AbundanciaDe los cerca de 34,000 documentos de Word, en 39 las autoridades colombianas han encontrado referencias salvadoreñas hasta ahora. Las más importantes son Ramiro, Ramiro salvadoreño y FMLN.
Foro por las FARCSe hace referencia a una actividad de solidaridad financiada por las FARC en El Salvador en 2001, a la que fue Rodrigo Granda y la ex embajadora de EUA en El Salvador, Rose Likins.
Amistad “Ramiro” aparece como uno de los interlocutores de las FARC en el continente. Este salvadoreño, que fuentes locales identifican como José Luis Merino, ofreció contacto con traficantes de armas.