Éxodo de familias en Caluco

A mediados de septiembre, unas 40 familias de la zona rural de la localidad de Panchimalco, al sur de la capital, abandonaron sus viviendas por amenazas de pandillas, especialmente contra habitantes de los caseríos El Cincho, Los Jorge, La Finquita, El Carmen y del cantón Mil Cumbres.

Tras este éxodo en Panchimalco, se sumó también otro episodio similar en el cantón El Castaño, en Caluco, departamento de Sonsonate, donde al menos ocho familias decidieron abandonar sus hogares a causa de amenazas de pandilleros. La Policía Nacional Civil (PNC) confirmó que la advertencia era solo para un grupo familiar; sin embargo, el rumor se extendió y más familias se desplazaron a otra zona.

Tres días después, otras 15 familias dejaron sus hogares en El Castaño, debido al incremento de violencia que se produjo tras conocerse el primer éxodo de personas.

Durante más o menos un mes, las familias se resguardaron en un refugio improvisado en el Centro Cultural Maya, en el centro de Caluco (Sonsonate). Luego de ese tiempo, acompañados de cuerpos de socorro, agentes de la PNC y elementos del Ejército, regresaron a sus hogares.

La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) informó días más tarde que el número de personas que han abandonado sus viviendas en Honduras, Guatemala y El Salvador entre 2012 y 2015 ronda las 109,800; la violencia es una de las causas principales.

Galerías:

ALBERGUE PARA LAS FAMILIAS VÍCTIMAS DE LA VIOLENCIA EN CALUCO

FAMILIAS HUYEN DE CALUCO TRAS AMENAZAS DE PANDILLA