El 28 de octubre de este año, la Fiscalía General de la República (FGR) presentó el requerimiento en el Juzgado de Paz del Puerto de la Libertad contra el agente presidencial por homicidio culposo y lesiones culposas.
El fiscal del caso dijo que la investigación fue difícil porque la documentación que solicitó e incautó en Casa Presidencial estuvo incompleta en un primer momento y tuvo que solicitarla nuevamente.
Pese al hermetismo alrededor del caso, las investigaciones de la Fiscalía revelaron que, esa madrugada, en la camioneta se transportaba uno de los nietos del presidente de la República, Salvador Sánchez Cerén. Uno de los fiscales del caso explicó que se determinó que al momento del accidente el motorista estaba cumpliendo sus funciones de brindar seguridad y que el vehículo estaba asignado a la familia del presidente y principalmente al nieto de Cerén.
La investigación se inició luego de que una mujer, anónimamente, denunció el hecho y dijo que el nieto del presidente había salido de un bar del Paseo El Carmen, en Santa Tecla, en la camioneta que arrolló al motociclista.
La esposa de la víctima concilió en noviembre con el motorista García Reyes por la cantidad de $2,500, que deberían ser cancelados en dos pagos antes de finalizar el año.
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