Con la aprobación de la referida ley había quedado derogada la Ley de Reconciliación Nacional, promulgada una semana después de la firma de los Acuerdos de Paz, en enero de 1992, por lo que, con la sentencia de la Sala, esta última vuelve a quedar vigente. En esta se contempla que no gozarán de amnistía los que, según el informe de la Comisión de la Verdad -que para 1992 aún no se conocía- participaron en graves hechos de violencia durante la guerra civil. La Sala ordenó a las entidades correspondientes hacer justicia en todos estos casos.