Juan Pablo II, el gran renovador

Juan Pablo II fue un Papa fuera de serie. Su más grande legado quizás haya sido renovar el rostro de la Iglesia católica.

Bien recibido
Sus luchas, como sus innovaciones al frente de la Iglesia católica, no siempre fueron bien recibidas. Un pistolero trató de matarlo en 1981. Sin embargo, su herencia a la fe es invaluable.

Su importancia no reside únicamente en que fue el Papa más viajero o que su pontificado fue el cuarto más largo de la historia. También fue un pontífice osado e innovador. Puso un pie en lugares santos judíos, lanzó las relaciones entre el Vaticano e Israel y se reunió con jefes de distintas religiones, islámicos incluidos. Algo que jamás había hecho otro Papa.