Las autoridades de Roma instalaron pantallas gigantes de televisión en siete grandes lugares de la capital italiana para que los fieles pudieran seguir en directo la transmisión del solemne funeral por el papa Juan Pablo II, el viernes.

Entre los lugares donde se instalaron las pantallas gigantes se encuentran los estadios Olímpico y Flaminio, con capacidad para 80 mil y 30 mil espectadores, respectivamente.

Asimismo, el funeral del difunto pontífice se vio en las pantallas gigantes ubicadas en el Circo Máximo, la plaza del Popolo, la plaza de San Juan de Letrán, la plaza de San Pablo Extramuros y en la zona de Tor Vergata, en las afueras deRoma.

Las autoridades ya habíansubrayado que, en ningún caso, la masa ingente de peregrinos, fieles o simples curiosos que se acercaron a Roma, y que superaron los dos millones de personas, podrían asistir al funeral en la plaza de San Pedro y su entorno.

Fe y tecnología

Tan solo unos 300 mil fieles pudieron seguir el funeral en el área comprendida entre un pequeño segmento de la plaza de San Pedro, la Via della Conciliazione (la calle que une el Vaticano con Roma) y la plaza del Risorgimento.

La mayor parte de la plaza de San Pedro estuvo reservada para las alrededor de 200 delegaciones internacionales que asistieron a las exequias fúnebres, así como a los servicios de seguridad, protección civil y comitivas.

Así, los peregrinos que presenciaron los funerales en San Pedro o sus aledaños han tenido que hacer noche en la misma zona para no perder el sitio, puesto que todo el perímetro del Vaticano quedó cortado al tráfico de personas y vehículos. Dicha disposición forma parte de las estrictas medidas de seguridad que ya comenzaban a notarse en Roma desde la noche del jueves hasta que culminó el acto.