Dos latinoamericanos entre los cinco favoritos

Roberto Valencia/AP
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Las redacciones de cientos de medios de comunicación que trabajan en idiomas distintos los citan para el cónclave del 18.

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America Latina preente.

Mencionados en todos los idiomas

 

Además de los dos latinoamericanos, estos son los tres nombres que aparecen en casi todos los listados elaborados por medios de los cinco idiomas analizados.

FRANCIS ARINZE, de Nigeria.

Uno de los nombres más repetidos entre los posibles candidatos es el del nigeriano de 72 años Francis Arinze. Aparece como el posible primer papa negro, aunque hay quienes dicen que él es tan africano como romano. Trabaja en el Vaticano desde 1984, cuando Juan Pablo II lo nombró para dirigir el departamento que se ocupa de las relaciones de la Iglesia con otras confesiones. Sus credenciales doctrinales son intachables para el sector conservador. Fue asesor de la Congregación para la Doctrina de la Fe, que dirigía Ratzinger.

DIONIGI TETTAMANZI, de Italia.

De 71 años y obispo de Milán, se lo define como un gran intelectual, brillante, abierto y considerado conservador en lo moral. Tiene muchos amigos y pocos enemigos, lo que lo podría convertir en un hombre de consenso si las votaciones no se decantaran por ningún otro. Lo frena su escasa proyección internacional.

ANGELO SODANO, de Italia.

De 78 años, el que concluyó el pontificado de Juan Pablo II como secretario de Estado, es decir, como canciller, tiene sólidos contactos en Italia y fuera de ella. Muchos de los papas de este siglo ocuparon antes el cargo que Sodano desempeñó. En contra, se dice que es un hombre poco carismático, ligado a Juan Pablo II, y pesa en su contra la reconocida antigua amistad con el dictador chileno Augusto Pinochet.

Los cardenales procedentes de América Latina siguen entre los más nombrados por los medios de comunicación para convertirse en el sustituto de Juan Pablo II. Los nombres del hondureño Óscar Rodríguez Maradiaga y del brasileño Claudio Hummes ganan peso en las agendas informativas a medida que se acerca el cónclave.

Para determinar cuáles son los papables que con más fuerza están sonando en las redacciones de todo el mundo, LA PRENSA GRÁFICA realizó un ejercicio de investigación entre todos los medios que se publican en inglés, francés, castellano, alemán e italiano.

“Google” permite realizar búsquedas entre noticias publicadas, por lo que se quiso determinar cuántas veces han hablado sobre cada uno de los papables desde el lunes hasta ayer jueves.

Los resultados de un cónclave son impredecibles, por lo que el resultado de este experimento no define quién será el papa, pero sí cuáles son los nombres que se barajan en las redacciones del mundo.

Cabe señalar que las conclusiones confirman que la idea de que el próximo papa sea latinoamericano es algo que no se descarta en ninguno de los idiomas analizados. Destacan, en este sentido, Hummes y Rodríguez Maradiaga.

Junto con ellos, también tiene fuerza la candidatura del cardenal nigeriano Francis Arinze, quien se convertiría en el primer papa de color, y las de los italianos Dionigi Tettamanzi y Angelo Sodano.

Cabe señalar que otro de los papables, el alemán Joseph Ratzinger, se excluyó del listado porque fue, con diferencia, el más nombrado en todos los idiomas, pero resulta imposible saber cuántas lo fue por ser papable y cuántas por ser decano del Colegio Cardenalicio.

Diferencias por países

El hecho de que hay nombres por los que apuestan casi todas las redacciones estudiadas no excluye que haya diferencias entre los países. Así, por ejemplo, entre los medios de habla hispana se menciona, aparte de los dos cardenales latinoamericanos ya citados, al mexicano Norberto Rivera.

Consecuencia del gran número de medios de comunicación que hay en España, en el listado se ha “colado” el cardenal español Antonio Rouco Varela, de quien apenas se habla fuera de ese país.

Algo similar ocurre en los medios de Francia y de los países que tienen el francés como idioma oficial, como ocurre en el caso de Bélgica. Entre los de Hummes, Arinze o Sodano irrumpe con relativa fuerza el nombre del arzobispo de Bruselas, Godfried Danneels.

Los medios de comunicación que tienen el alemán como idioma de trabajo son los que más relegan a los candidatos latinos. En esas redacciones también se cree que este puede ser el cónclave del que salga un papa que no sea europeo; sin embargo, le apuestan a otras opciones como Iván Dias, de la India, aunque el primer puesto lo ocupa siempre el cardenal nigeriano.

Los medios italianos, de los que se supone tienen a los periodistas que mejor conocen la idiosincrasia del Vaticano, también tienen sus favoritos. Cinco de los siete cuyos nombres más se han publicado esta semana son italianos. De hecho, son los periodistas de este país los únicos que no citan al hondureño Rodríguez Maradiaga entre los “papabili” con mayores oportunidades de ser elegidos.

Los medios que tienen el inglés como herramienta de trabajo son los más numerosos, pero no alteran la tendencia general: el cardenal hondureño y el brasileño tendrán que disputarse el papado con el nigeriano Arinze y los italianos Tettamanzi y Sodano.

Son los cinco nombres que esta semana más se han publicado en cinco de los idiomas más importantes, aunque no hay que fiarse. En los pasillos de la Santa Sede sigue vigente el viejo dicho que asegura: “Quien entra al cónclave como papa, sale como cardenal”.


El amigo de “Lula” podría ser el próximo papa de la Iglesia

Hace casi 10 años, cuando el cardenal Claudio Hummes recibía el capelo cardenalicio en 1996 y se convertía en arzobispo de Fortaleza, pronunció una frase que sus biógrafos recordarán como una predicción humilde pero incorrecta: “Mi próximo paso será retirarme o irme a la tumba”.

Sin embargo, dos años después fue designado arzobispo de Sao Paulo, la diócesis más grande de Brasil, y ahora el purpurado de 70 años es considerado candidato a suceder al papa Juan Pablo II.

Considerado liberal en asuntos sociales y conservador en cuestiones de doctrina, Hummes nació el 8 de agosto de 1934. Era hijo de inmigrantes alemanes.

Cuatro años después de ser ordenado sacerdote franciscano en 1958, se doctoró en Filosofía en la Universidad Pontificia Antonianum de Roma, y concluyó en 1968 su ciclo de estudios en el Instituto Ecuménico de Bossy, en Ginebra.

En 1975 fue designado a Santo André, un suburbio industrial de las afueras de Sao Paulo. Fue allí donde el sacerdote discreto y de hablar suave ganó por primera vez la atención nacional, protegiendo y defendiendo a trabajadores metalúrgicos en huelga que desafiaban a finales de los setenta el régimen dictatorial que imperaba en Brasil.

Las puertas de la iglesia de Hummes siempre estuvieron abiertas para los huelguistas que intentaban escapar. Uno de los muchos trabajadores que buscó refugio fue el combativo líder del sindicato y hoy presidente de Brasil: Luiz Inacio “Lula” da Silva.

Un año después, en su primer día como arzobispo de Sao Paulo, Hummes criticó la economía globalizada de mercado, así como la miseria y la pobreza.

“La economía de mercado ha reinventado la pobreza en muchos países —dijo Hummes poco después de asumir el cargo—; debemos encontrar formas alternativas, una tercera vía, para garantizar crecimiento económico sin sacrificar a los pobres ni causar desempleo.”