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Delegación salvadoreña
rinde tributo a Juan Pablo II mundo@laprensa.com.sv Tras orar frente al cuerpo del Papa, el canciller Francisco Laínez destacó el cariño que Juan Pablo II tuvo por El Salvador. |
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El ministro de Relaciones Exteriores de El Salvador, Francisco Laínez, se mostró ayer emocionado al hablar de los minutos que, junto con la primera dama, Ana Ligia de Saca, y el ministro de Gobernación, René Figueroa, pudo orar ante la capilla ardiente de Juan Pablo II. Como el resto de delegaciones oficiales, la salvadoreña se dirigió al Vaticano a las pocas horas de que sus últimos componentes aterrizaran en Roma, en este caso aproximadamente a las 3 de la tarde. Además de Laínez, Figueroa y la primera dama, viajaron la ex ministra de Relaciones Exteriores María Eugenia de Ávila y el ex embajador salvadoreño ante la Santa Sede Roberto Simán. “Fue un momento sublime”, afirmó Laínez. “Es difícil explicar la cantidad de emociones encontradas que uno tiene al presenciar la partida de este hombre, que deja uno de los legados más importantes en la historia de la humanidad”, agregó. El funcionario salvadoreño destacó que Karol Wojtyla, que viajó al país en dos ocasiones durante su pontificado, siempre tuvo una palabra de apoyo para El Salvador “y para que los hermanos discutieran las ideas con las ideas”. Por último, el jefe de la diplomacia salvadoreña, quien encabeza la delegación oficial del país como el funcionario de mayor rango de los presentes en Roma, evitó pronunciarse sobre la expectativa que se ha creado en el hemisferio por la posibilidad de que el cónclave, que iniciará el día 18, arroje un papa originario de Latinoamérica. “No quiero opinar.... Por respeto creo que debemos centrarnos en las exequias de Juan Pablo II y no perdernos en especulaciones sobre su sucesor”, atajó.
Saca: “Me quedé para asistir a los actos por Juan Pablo II” El presidente Antonio Saca reiteró ayer que no viajó a Roma para asistir a las exequias del papa Juan Pablo II por “compromisos previos”. Ayer, Saca asistió a la misa en la catedral de San Salvador. Allí, el mandatario enfatizó, en una conversación telefónica mantenida desde San Salvador con este enviado especial, que “desde el sábado y durante toda la semana he acudido a diferentes celebraciones eucarísticas por el pontífice”. El presidente llegó a argumentar que se había quedado en El Salvador “básicamente para asistir a los actos por Juan Pablo II”, tras detallar que de hecho se disponía a asistir a la misa principal que iba a oficiarse en la catedral con el nuncio apostólico y el arzobispo de San Salvador, Fernando Sáenz Lacalle. “He enviado una delegación del más alto nivel, con dos de los principales ministros y mi esposa”, respondió cuando se le preguntó específicamente qué compromisos no había podido cancelar. “Nos hemos dividido”, afirmó cuando se le preguntó si había considerado más importante asistir a los actos locales en honor del papa Juan Pablo II.
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