SUPOSICIONES. Las votaciones fueron secretas. Solo quedaba lugar para las interpretaciones art�sticas, como esta, de lo que estaba pasando dentro de la Capilla Sixtina.
26 horas bastaron para elegir al Papa

Ciudad del Vaticano/Agencias
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El c�nclave que produjo a Benedicto XVI no ha sido el m�s corto de la historia, pero s� ha sido, sin duda alguna, el m�s visto de que se tenga memoria, y el primero transmitido casi ininterrumpidamente.

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Los papables que no fueron
Varios cardenales fueron considerados como posibles sucesores de Juan Pablo II.

Cardenal �scar Rodr�guez Maradiaga, de Honduras.

Cardenal Dionigi Tettamanzi, obispo de Mil�n, Italia.

Cardenal Francis Arinze, originario de Nigeria.

Cardenal Carlo Mar�a Martini, te�logo, ex obispo de Mil�n.


El m�s largo
En contraste con el c�nclave finalizado ayer, el m�s largo tuvo lugar en el siglo XIII, y dur� dos a�os, nueve meses y dos d�as.

El c�nclave que produjo a Benedicto XVI no ha sido el m�s corto de la historia, pero s� ha sido, sin duda alguna, el m�s visto de que se tenga memoria, y el primero transmitido casi ininterrumpidamente.

Los pr�ncipes de la Iglesia solo tardaron 26 horas en elegir como pont�fice al cardenal alem�n Joseph Ratzinger, que tomar� el nombre de Benedicto XVI.

La fumata blanca que anunci� el acuerdo de elecci�n del Papa ocurri� a las 5:50 p.m., hora de Italia, una hora antes de la prevista para quemar las papeletas en caso de que no hubiera acuerdo.

De acuerdo con los c�lculos, solo fueron necesarias cuatro votaciones, las mismas que se llevaron a cabo para escoger a Juan Pablo II y una m�s que en el caso de P�o XII, para que los pr�ncipes de la Iglesia llegaran a un acuerdo.

Los cardenales votaron una vez el lunes por la noche, dos el martes por la ma�ana y la decisiva el martes por la tarde.

La rapidez en la elecci�n mantiene la t�nica de los �ltimos decenios, en los que no se han superado las 11 votaciones.

P�o XII fue elegido con tres votaciones y en apenas 24 horas; Juan Pablo I, con cuatro; Pablo VI, con cinco; Juan Pablo II, con ocho, y Juan XXIII, con 11.

Apuestas se cumplen

Los d�as anteriores al c�nclave, los expertos ya pronosticaban que esta elecci�n ser�a corta, ya que la Iglesia no deseaba extenderla por mucho tiempo para no dar la impresi�n de que se encuentra dividida.

“Solo han pasado 24 horas. Es sorprendente qu� r�pido fue elegido”, se asombr� Radio Vaticano en su primer comentario.

Ratzinger fue elegido en el segundo d�a, tal como sucedi� en el caso de P�o XII, cuyo nombre se conoci� en la que era hasta ahora la asamblea m�s breve celebrada en las �ltimas d�cadas.

Fue el 1.� de marzo de 1939 cuando el nombre de ese Papa, que sucedi� a P�o XI, fue tambi�n dado a conocer en el segundo d�a de votaciones.

A ese c�nclave le precedi� el m�s largo del siglo XX y al que se conoce como uno de los m�s tensos y disputados, y del �nico que se sabe que alguno de los presentes fue excomulgado por romper precisamente las reglas.

El n�mero 16

El anterior Papa que llev� el nombre de Benedicto, antes de Joseph Ratzinger, fue Benedicto XV, quien result� elegido en el c�nclave celebrado entre el 31 de agosto y el 3 de septiembre de 1914, en plena guerra mundial.

Posteriormente, el 2 de febrero de 1922, se abri� el c�nclave que ser�a el m�s largo del siglo, donde fue elegido el papa P�o XI.

Sin embargo, el c�nclave m�s largo de la historia ha sido en 1268, en la regi�n italiana de Viterbo, y dur� dos a�os, nueve meses y dos d�as.

Ni siquiera cuando les recortaron dr�sticamente los alimentos lograron los cardenales alcanzar la necesaria mayor�a de dos tercios.

Solo cuando la indignada poblaci�n empez� a llevarse el tejado que cubr�a la sala donde estaban reunidos se eligi� al papa Gregorio X, en septiembre de 1271, y m�s que nada por miedo a las primeras tormentas del oto�o.

El c�nclave m�s visto

Lejanos del siglo XXI est�n esos d�as de c�nclaves interminables. Ahora, la inmediatez de los medios de comunicaci�n traslada en tiempo real las incidencias, an�lisis y opiniones en torno a las votaciones que efect�an los cardenales.

Si bien este no ha sido el c�nclave m�s corto de la historia, lo que ha sido, sin lugar a dudas, es el m�s visto de que se tenga memoria.


Después del cónclave

Los pr�ncipes de la Iglesia dijeron estar felices con la elecci�n de Benedicto XVI.

El Colegio de Cardenales cumpli�, con m�s celeridad de la esperada, la misi�n que la Iglesia les hab�a encomendado y cuya resoluci�n ten�a en vilo al mundo entero.

Tras la elecci�n, los cardenales han quedado liberados del secreto del c�nclave, aunque no podr�n revelar los debates ni lo que sucedi� en las 26 horas que estuvieron encerrados eligiendo al nuevo Papa.

Los primeros en abandonar el recinto de C�nclave fueron los cardenales de India, Ivan Dias, el alem�n Walter Kasper y el austr�aco Christoph Schonborn.

Los purpurados, sin embargo, no abandonar�n Roma a�n. El pr�ximo domingo deber�n asistir a la misa de entronizaci�n de Benedicto XVI. El nuevo Papa, adem�s, tendr� que decidir qui�nes de ellos lo acompa�ar�n en los puestos clave en el Vaticano.

Sin sorpresas

No estoy sorprendido de un c�nclave tan breve”, asegur� el cardenal chileno Francisco Javier Err�ruriz, despu�s de la elecci�n del purpurado alem�n Joseph Ratzinger, como nuevo Papa.

El cardenal chileno hizo esta declaraci�n cuando sal�a del per�metro del c�nclave, en el Vaticano, donde permanecieron los 115 purpurados electores desde el lunes, seg�n la prensa italiana.

Por su parte, el cardenal austr�aco Christoph Schonborn, al que se le considera en la l�nea de Ratzinger, dijo estar “muy contento, incluso por la Iglesia en Austria”, con la elecci�n del que fue el guardi�n de la ortodoxia cat�lica.

Los cardenales alemanes que participaron en este c�nclave tambi�n saludaron la elecci�n de un compatriota como jefe de la Iglesia cat�lica.

“Cuando se cumplen 60 a�os del final de la guerra (la Segunda Guerra Mundial), supone un cambio” para Alemania, asegur� el cardenal Karl Lehmann, quien se mostr� encantado con esta elecci�n, al igual que su compatriota, el tambi�n purpurado Walter Kasper.