Impreso por egonzalez el 09/12/01 a las 8:04PM horas
“Debería
El Salvador
solidarizarse
con esta trage-
dia y con el Go-
bierno de Esta-
dos Unidos, pe-
ro más que
nada con los familiares de las víc-
timas. Y pienso que deberían can-
celar todas las actividades planea-
das para este 15 de septiembre y
hacer lo mismo que hizo el presi-
dente Vicente Fox, suspender todas
las festividades en supaís enmues-
tra de respeto y solidaridad con Es-
tados Unidos. Es tan sólo justo que
fuera así ya que muchos de noso-
tros los que vivimos acá en este
país no podemos estar de fiesta
después de lo sucedido.”
Margin Medrano
MMEDRANO@acc.org
“Soy salvadoreña de nacimien-
to, y viví los peoresmomentos de la
guerra enEl Salvador, vi muertos a
diestra y siniestra, pero déjenme
decirles que lo visto el día de ayer
es totalmente inaudito. Les pido a
aquellas personas creyentes eleven
una plegaria por esas almas a las
que a lo mejor y lo más seguro es
que no les quedó tiempo de pedir
perdón al Creador y suplicarle a
Dios hayaperdonado sus pecados y
Jueves 13 de septiembre de 2001
LA PRENSA GRÁFICA
21
“Esperamos
que todos
nuestros
amigos en
Nueva York
estén bien
después de un
triste y trágico
día”, escribió
la cineasta
salvadoreña
Paula Heredia,
radicada en Nueva York.
Ella y su esposo Larry estaban
observando el incendio en las
torres gemelas del World Trade
Center –después de que dos
aviones se estrellaron contra
ellas– desde el piso 26 del
edificio de la cadena HBO, donde
ella trabaja.
“Cuando se cayó la segunda torre
del WTC, por supuesto estaba sin
poder hablar de lo increíble de la
escena”, cuenta Heredia.
Ayer miércoles la ciudad estaba
más tranquila, excepto por los
aviones militares y las sirenas,
escribió en un correo electrónico
“Esperamos que todo volverá a
estar tranquilo. Nuestros
pensamientos y mejores deseos
para ustedes”, puntualizó.
Salvadoreños en E.U.A. piden solidaridad
los reciba en su Santo Templo.”
Yaneth (Yedi1482@aol.com)
Los Ángeles, California
“Se conoce por losmedios infor-
mativos que casi el 80 por ciento de
los trabajadores de limpieza en las
torres gemelas eran salvadoreños
y hondureños, aproximadamente
de 500 a mil personas. Se conoce
gente que se ha estado comunican-
do pormedio de celulares desde los
escombros en WTC.”
Manuel Cáceres
molok@webtv.net
“Aquí también se siente lo que
ha pasado en los Estados Unidos.
Muchos canadienses trabajaban
en las torres gemelas. Pero tenía
que pasar, los Estados Unidos se
mete demasiado en las cosas de
otros países, ahora se ven los resul-
tados.”
Herberth Rodríguez
herbertr@sympatico.ca
El círculo de la violencia
“Ojalá que esta tragedia sirva
para recapacitar y vean qué tan du-
ro podría ser una guerra atómica
para la cual están siendo encami-
nados y preparando al pueblo en
general y promuevan y apoyen los
esfuerzos de paz y condenen las
agresiones; no es casualidad que
esto no sucede en otros países que
prefieren la paz a la violencia, es
sabido que la violencia siempre en-
gendra violencia y que se cosecha
lo que se siembra, y ésta se convier-
te en un círculo sin fin que conlleva
a hechos como el descrito.”
Vernaldino cifontes
verdad@LaPrensa.zzn.com
“La situación es verdaderamente
caóticayesoquenoestamos enNue-
vaYork. La tensiónsombríasepuede
sentir hasta en el aire. Las imágenes
hablan por sí mismas, es verdad que
nosotros perdimos a miles de nues-
troshermanos en laguerraenunpe-
ríodo de 10 años o más, pero es ver-
daderamente trágico que miles de
personas mueran en sólo una hora.
Lo más trágico es que son muertes
provocadas por un idealismo absur-
do. El Señor no se puede regocijar en
esto, es comprensible hasta cierto
punto el descontento de algunos
miembros de la comunidad islámica
contra los Estados Unidos, pero es
realmente ignorancia de su parte in-
volucrar a tanta gente inocente, gen-
te de diferentes nacionalidades que
no la deben.”
PROVISIONES.
Voluntarios forman una cadena humana para cargar botes
con alimentos y medicinas, cerca del río Hudson.
COMPATRIOTAS TESTIGOS DEL HORROR
“Me siento mal por toda esa gente”
“Lo que más me
conmovió fue ver a esa
gente que estaba
saltando desde las
torres directo a la
muerte”, escribió el
salvadoreño Jorge O.
Salmerón.
T
RISTE Y TRÁGICO
“Nos quedamos
sin hablar”
“La escuela donde yo
estaba (en Washing-
ton) se paralizó. Fue
como una película de
terror.”
Néstor Reyes
Nestorryes@cs.com
“Tal vez nuestros her-
manos nos ayuden
poderosamente en
oración.”
Jazmín Sanz
ing_yasmine@hot-
mail.com
Paula Heredia
Jorge O. Salmerón es un salva-
doreño que vive en Nueva York, a
unos 35 minutos del World Trade
Center, pero trabaja muy cerca de
allí.
“Cuando me di cuenta de lo que
estaba pasando, me fui para el te-
cho del edificio donde yo trabajo y
pude ver cómo las torres estabanen
llamas y poco después se desplo-
maron”, dice.
Y añade: “¡Es triste ver (que) es-
tas cosas ocurren! ¡Me siento mal
por toda esa gente quemurió! ¡Yo sé
que allí trabajaban muchos salva-
doreños!
Nadie podía entrar a la ciudad,
todos los accesos, puentes y túneles
fueron cerrados. Mucha gente dejó
los trabajos para recoger a sus hijos
en las escuelas porque esto parecía
una guerra.
Aviones de combate y helicópte-
ros volando sobre la ciudad; las
ambulancias por todos lados... to-
dos estábamos asustados.
También las comunicaciones no
estaban trabajando. Todos los ca-
nales de televisión y las radios esta-
ban transmitiendo esto en vivo.
Lo que más me conmovió fue
ver a esa gente que estaba saltando
desde las torres directo a la muer-
te.
Todas las autoridades están ha-
ciendo un llamado a las personas
para que donen sangre.
Cuandome desperté ahora en la
mañana yo creía que esto sólo ha-
bía sido un sueño, pero es realidad:
las torres gemelas ya no existen.
Ahora Nueva York se ve diferente.
Toda la gente está triste y enojada a
la vez”.
ESCOMBROS.
Trabajadores
permanecen
entre los
escombros de
una de las
torres gemelas,
en Nueva York.
Salvadoreños
residentes en
esa ciudad
brindaron su
testimonio
sobre la
tragedia.
Roxana Zelada
RoxZelada@gateway.net