Lleno. Desde temprano, los capitalinos abarrotaron las calles. El desfile del comercio, que partió del Salvador del Mundo y culminó en el parque Cuscatlán, tuvo una gran convocatoria pese al fuerte sol. FOTO DE LA PRENSA/Borman Mármol

Desde la plaza Salvador del Mundo hasta el parque Cuscatlán, miles de salvadoreños se adueñaron de la calle, las aceras, los graderíos y cualquier espacio que les permitiera disfrutar del desfile del comercio, celebrado ayer en el marco de las fiestas al Divino Salvador del Mundo.

María José Saavedra

La salida de la caravana, conformada por carrozas y sus reinas, bandas de paz, los “viejos de agosto”, las gigantonas de Jocoro y a la cabeza el alcalde de San Salvador, Norman Quijano, fue puntual.

El jefe municipal dijo que en total eran 20 las carrozas representadas por igual número de reinas de los edificios del mercado Central y negocios de la capital.

Los capitalinos que llegaron de todas partes, como Gloria Molina, su hija y nieto que llegaron desde San Bartolo, manifestaron que el evento estaba mucho más entretenido que en años anteriores.

En medio de la gente que se alborotaba por los dulces que tiraban las reinas y el mismo alcalde, los comerciantes, para quienes va dedicado el desfile, llegaron con su venta. Vladimir Muñoz, vendedor de sombrillas, dijo que la venta se movía bastante bien, y la canasta de manzanas con azúcar caramelizada de Ana Méndez también comenzaba a vaciarse a medida la mañana avanzó.

El desfile, sin duda, dio un momento de gozo y entretenimiento a los que asistieron.

En cuanto a la seguridad hubo un despliegue de 1,300 agentes del Cuerpo de Agentes Metropolitanos, así como agentes de la Policía Nacional Civil.

Los incidentes ocurridos durante el desfile fueron menores. Entre ellos se realizó el decomiso de una mínima cantidad de marihuana a seis menores. Dos cachiporras resultaron desmayadas por deshidratación.