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Las familias que fueron beneficiadas con casas en la comunidad. No todas han terminado sus pagos.

Desencanto. Los habitantes de la comunidad Regalito de Dios, fundada después de los terremotos de 2001 como parte de un proyecto para ayudar a familias en zonas de riesgo, han dejado de creer en la política.

Fueron 214 las familias beneficiadas con el proyecto que fue impulsado por la Alcaldía de Soyapango y la fundación A-Brazo parte de la iglesia presbiteriana.

Después de la selección se les informó que por sus casas, que fueron construidas por los mismos habitantes, se les cobraría un importe “simbólico” y que al finalizar de cancelar se les darían las escrituras y posteriormente cancelarían el dinero de los terrenos donde han construido.

Las cuotas se dividieron dependiendo de la capacidad económica de los habitantes de cada casa. Así, el importe iba desde los $23 hasta los $40.

Algunos de los habitantes terminaron de pagar sus cuotas en 2006, pero desde entonces aún no se les ha escriturado formalmente como dueños del inmueble.

Al ver esta situación algunos aprovecharon la campaña de Maritza de Guatemala para hablar con ella y buscar su apoyo.

Guatemala les entregó semillas que, según un informante que pidió anonimato por temor a perder su casa, estaban vencidas y pese a los cuidados no dieron mayor resultado.

Además, se llevó un material para la construcción de una casa, pero solo fue dejado en la comunidad y finalmente fue robado poco a poco.

Según Guatemala esto fue una situación “política” en la que se buscó “separar a la comunidad para que se opusiera a los trabajos”.

La candidata ha afirmado que de resultar electa se hará cargo de este problema de manera prioritaria.

Por su parte, el actual alcalde de Soyapango y candidato a la reelección, Carlos Ruiz, dijo, a través de su departamento de prensa, que tiene toda la documentación pertinente para soportar lo que pasa en la comunidad pero que no pensaba hablar hasta pasadas las elecciones.

La gente de la comunidad insiste en que de ambas partes todo suena solamente a promesas de campaña y que no ven por ningún lado una voluntad de resolverles el problema.

A la comuna actual también se le ha acusado de favorecer a personas del partido para poder vivir en la comunidad y de pedir la afiliación al partido para poder conservar sus casas.

El terreno donde se encuentra la comunidad fue donado por un banco a la alcaldía con el propósito de crear la comunidad y ayudar a personas desplazadas por los terremotos.