El edil y su esposa, Ana Marina Alvarenga, aseguran que no estuvieron ese día en el municipio. La pareja respalda cualquier indagación de la PDDH y de Educación.

Amadeo Cabrera/Omar Morán
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El alcalde de Cinquera, Guillermo Rivera, y su esposa, la docente Ana Marina Alvarenga, rechazaron ayer estar detrás de la protesta realizada por niños y jóvenes, el pasado viernes, cuando el candidato de ARENA, Rodrigo Ávila, visitó el municipio. Ambos dijeron respaldar cualquier investigación que se apresten a realizar instituciones del Estado.
El alcalde aseguró que “los jóvenes por su propia iniciativa” tomaron la decisión de protestar, mientras que la intervención de los niños “es una cuestión propia, (pues) nosotros no hemos enviado a ningún niño”. Rivera explica que ese día estaba en San Isidro, Cabañas, “recogiendo” el FODES (fondos gubernamentales) y al llamar a la comuna se le informó que alumnos del instituto y jóvenes iban a protestar. “Yo les dije: ‘Miren está bien, siempre y cuando no vaya a ver una cuestión de agresión de ningún tipo’. Es falso que yo haya instrumentalizado a la gente”, se defendió.
El edil efemelenista, que no fue reelecto en enero pasado, no condenó la protesta pues reconoce el derecho de la población a protestar. “Condenable no es porque usted lo hace por su propia iniciativa. Es una demostración de inconformidad”, argumentó.
Alvarenga, por su parte, sostuvo que ese día se encontraba en el centro escolar del cantón San Nicolás, de Cinquera, donde es directora. “Me fui para San Nicolás desde las 8:00 a. m., por lo tanto no estuve en Cinquera porque regresé a las 6:00 p. m. Me extraña que me estén acusando”, dijo.
Alvarenga reconoció que la directora del instituto le pidió, a principios de mes, que le ayudara a dar una clase que no está siendo impartida por ausencia de la docente responsable. “A partir del lunes empecé a colaborar voluntariamente impartiendo la asignatura de Estudios Sociales”. Agregó que solo asistió los días lunes, martes y jueves. Ella tampoco se atrevió a condenar esta protesta. “Si los padres tienen una definición política partidaria, los jóvenes tienden a seguir a los padres. No lo vería como otra cosa del otro mundo”, valoró.
LA PRENSA GRAFICA conoció que el pasado viernes los alumnos del instituto solo recibieron clases optativas impartidas por universitarios en proceso de graduación que viajan desde San Salvador. Además, la directora del instituto, se dijo, se encontraba en reunión en la Dirección Departamental de Educación.
Opinan pobladores
Habitantes de Cinquera condenaron ayer la utilización de niños y jóvenes en la protesta del pasado viernes en el municipio durante la visita de Ávila. “La mentalidad del niño es pueril y si le inyecto la clase de idea que tengo yo de viejo eso va retoñando a tal grado que pervierte los pueblos y los van hundiendo cada vez a la desgracia”, dijo un habitante que por seguridad omitió su nombre. Otros como Tomás Rivera también no aprueban este tipo de protestas. “Eso es un gran error: a los niños hay que enseñarles la doctrina de la palabra de Dios no doctrinas de partido. La educación de los niños comienza de sus padres”, dijo.
Rubén Hernández, tras comentar los hechos, solo se atrevió a decir: “En esta contienda no es bueno cómo andan presentando a la juventud ante los contrarios del FMLN. En esta campaña eso no es bueno”. José Paz, otro poblador, también reprobó el uso de niños y jóvenes en actividades de protestas partidarias. “Es una mala enseñanza. La democracia es respetar tu opinión y que vos respetés la mía. Van al desvío y si van mal orientados van a caminar pando.”
El candidato presidencial del FMLN, Mauricio Funes, no tiene certeza de la participación de menores de edad en los hechos; sin embargo, advirtió que si existen “responsables tienen que ser sancionados, sean del partido o no”.