Perfil

Nombre: Samuel Antonio Quirós.

Carrera:  Graduado en Economía y Finanzas con Maestría en Banca de Desarrollo, en American University, Estados Unidos.

“Me cuesta creer que alguien que nunca ha manejado una empresa en su vida pueda tener la capacidad para manejar la empresa más grande de un país: el gobierno.”

Para Samuel Antonio Quirós, ejecutivo de Grupo Q, la suerte sobre quién ganará las elecciones presidenciales “no está echada”. También considera que en el mejor de los escenarios, la economía podría mejorar en el segundo trimestre de este año.

¿Cuál es su valoración de la coyuntura actual en el país?

La incertidumbre es lo que tiene a todo el mundo preocupado; a los bancos, al consumidor, a nosotros como empresarios. Tenemos toda la bulla internacional, también las elecciones. Creo (que) se definen las elecciones (y) superamos una etapa importante, pues como empresarios decimos: “OK, bajo esta y esta circunstancia estamos dispuestos a hacer esto”.

Independientemente de quién gane las elecciones, ¿las condiciones en el país serán las mismas?

Puede ser significativo el impacto de una ganancia no amistosa a las empresas. De eso estoy convencido. Indistintamente de que se pueda tener las buenas intenciones. Va a haber un período de no inversión producto de esto.

¿Se pintaría un panorama difícil de ganar el partido de izquierda?

Creo que sí.

De llegar al Ejecutivo un partido “no amistoso”, como usted dice, ¿se extenderían los efectos de la crisis económica en el país?

Estoy convencido de que se complicarían muchísimo más. Además de que simplemente cualquier visión de inversión que pudiésemos tener nosotros aquí u otro empresario desaparece de entrada. El Salvador realmente no tiene grandes problemas de endeudamiento como país, teóricamente pudiera acceder a financiamiento para darle impulso a la actividad económica; la plata que va a agarrar el Gobierno para endeudarse va a venir de afuera, de los bancos o de los inversionistas, y los inversionistas no van a poner plata con un gobierno de izquierda. En Venezuela, un país riquísimo, los inversionistas no están llegando; les han nacionalizado todas las empresas. Definitivamente eso sería lo peor que le pudiera pasar a El Salvador.

¿Sería lo peor que llegue un partido de izquierda al poder?

No, que llegara un partido de izquierda que no necesariamente crea en los principios democráticos. Te puedo asegurar que aquí existen empresarios que no les importaría una alternancia partidaria, siempre y cuando el partido que alterna el poder crea en la democracia.

¿Como el Partido de los Trabajadores en Brasil?

El Partido de los Trabajadores, el Partido Demócrata Cristiano de Chile; pero son los países con cultura democrática. El funcionamiento democrático del país no lo deja hacer locuras. (De lo contrario) dudo mucho que haya mucho entusiasmo por invertir.

¿Está preparado El Salvador para una alternancia en el poder?

Con las fórmulas de hoy, no. Con otra fórmula, en lo particular, creo que no es preocupante.

¿Tienen proyecciones de inversión de darse uno u otro resultado?

Nosotros en Honduras adquirimos dos marcas hace unos meses, Mazda y Chevrolet, con lo cual logramos una participación de mercado importante. ¿Por qué lo hicimos? Porque en Honduras existen dos partidos, que son un poquito a la izquierda, un poquito a la derecha. En Panamá, hemos hecho inversiones importantes; hay elecciones, me atrevería a decir que se mueven dentro de un rango aceptable. La premisa fundamental es un tema democrático, de libertades, porque al final del día si hay un problema, ¿a dónde voy a ir a pedir que me respeten mis derechos? En Guatemala, Colom tiene una visión un poco más izquierdista, pero funciona como país y hemos hecho inversiones. En Nicaragua nos estamos recogiendo un poco porque sentimos que el Gobierno no es muy amistoso hacia los intereses de los empresarios. En Costa Rica, cualquier cosa que pase a nivel político sé que habrá buenos o malos gerentes, pero no estoy preocupado de que me van a quitar las cosas.

¿Ve reñida la elección?

La suerte no está echada. Ha habido un cambio de ARENA al manejar temas de corte populista; son cosas realmente importantes, que no son típicas de un partido de derecha. Nosotros, empresarios, apoyamos la responsabilidad social de los gobiernos y es la parte que no nos molesta de un partido de izquierda; lo que nos puede molestar un poquito es la vocación democrática que pueda tener o no. Hay dos cosas fundamentales en un partido de gobierno: cuál es la visión de país del líder de turno y sus capacidades gerenciales. Me cuesta creer que alguien que nunca ha manejado una empresa en su vida pueda tener la capacidad para manejar la empresa más grande de un país: el gobierno.

¿El FMLN no genera confianza en ninguno de estos puntos fundamentales?

Desde mi punto de vista, no. Creo que Mauricio (Funes) es una persona exitosa como periodista, y de periodista a manejar un país hay una distancia un poco kilométrica. No me parece una persona que le falta intelecto, todo lo contrario. No sé si dentro del partido (FMLN) existe gente con esa capacidad. Creo que por el otro lado puede haber más gente preparada, y de hecho en las encuestas salen quiénes son los que tienen más capacidad para manejar el país. Está claro que hay una tendencia más enfocada en ARENA, y eso lo dice el país, no yo. Estoy optimista de que el país va a tomar la decisión correcta.

¿Cómo enfrenta Grupo Q la crisis económica actual?

Sin duda alguna la crisis ha afectado a todo el mundo. Se actúa con cautela, lo que lleva al consumidor a ser más recatado. La segunda inversión más grande de una persona es el automóvil y gran parte de los crecimientos de la industria ha venido un poco por el financiamiento. La crisis ha hecho que los bancos sean más conservadores, más exigentes, y descalifica a gente que bajo circunstancias normales califica para préstamos.

¿Cuánto se redujo la proyección de crecimiento?

En toda Centroamérica ha sido diferente; el año pasado la empresa cerró con el mismo nivel de ventas (que 2007). Deberíamos haber crecido un 10%. En El Salvador llegamos a tener en mayo (de 2008) casi 4,500 carros en inventario, hoy tenemos 1,000. Todas las industrias tienen sus ciclos, y este es el ciclo negativo de la industria (automotriz), pero se vienen tomando diferentes acciones correctivas.

¿Qué acciones?

Tenemos dos a tres meses de no recibir carros, y para los próximos meses estamos en los niveles óptimos de inventarios, nada más estamos reponiendo vehículos que se mueven mucho.

¿Cuánto dejó de invertir Grupo Q en la región debido a la crisis?

Hemos pospuesto por lo menos $50 millones en inversiones, incluyendo las Torres Q. Sentimos que no es momento para hacerlo. Para este año estimamos una reducción del mercado en un 30%.