Una misión de observadores electorales procedentes de Estados Unidos, invitados por la Fundación Share, se presentó ayer ante los medios de comunicación.
El grupo está compuesto por 150 ciudadanos estadounidenses procedentes de 18 estados del país norteamericano.
Sindicalistas, académicos, profesionales y religiosas, acompañadas de Becky Fast, ayudante del congresista Dennis Moore, integran la delegación que se desplegará en 12 municipios de los departamentos de Chalatenango, Sonsonate, La Libertad, San Salvador y San Vicente. Brindarán su informe preliminar el lunes.
Por su parte, la Asociación Nacional Salvadoreño Americana (SANA, por sus siglas en inglés) anunció que aportará 100 observadores internacionales para que también sean partícipes del proceso electoral de mañana.
Líderes salvadoreños nacionalizados estadounidenses, canadienses y australianos, con un grupo de extranjeros de diversos países del mundo, conforman la delegación.
Mario Fuentes, director de SANA, aseguró que estarán pendientes para denunciar cualquier irregularidad que pueda suscitarse en la jornada. Fuentes se unió al llamado de los otros jefes de misión para que los pobladores acudan masivamente a los centros de votación y emitan el sufragio sin miedo ni presiones ideológicas.
En el marco de su visita, una representación de SANA entregó una carta a la Embajada de Estados Unidos y pidió que se hiciera pública su posición de no apoyar a los partidos en contienda.
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