Equipos de trabajo

Los 14 encargados de presentar las propuestas estarán distribuidos en seis equipos que definirán líneas en seis áreas.

EQUIPO ECONÓMICO

Está conformado por Alexander Segovia y Carlos Cáceres, del grupo Amigos de Mauricio y Gerson Martínez y Roberto Lorenzan, diputados del FMLN. Propondrán las políticas económicas y financieras.

EQUIPO SOCIAL

Lo integran María Isabel Rodríguez, ex rectora de la UES; Héctor Silva, ex-alcalde de San Salvador; el historiador Roberto Turcios; y también Alex Segovia. Definirán políticas de salud, educación y programas sociales.

DE SEGURIDAD

En este tema trabajarán la jueza de menores Aída Santos de Escobar y el diputado del FMLN al Parlamento Centroamericano (PARLACEN), Manuel Melgar. Plantearán reformas al sector justicia.

EXTERIORES

Aquí trabajarán Héctor Dada, ex ministro de Relaciones Exteriores; Hugo Martínez, diputado del FMLN; y Francis Hasbún, asesor político de Funes. Incluye cooperación y salvadoreños en el exterior.

DEFENSA NACIONAL

Aquí el coronel David Munguía Payés tendrá un rol central con el apoyo del equipo encargado de los lineamientos de seguridad pública. Definirán políticas de seguridad nacional e inteligencia de país.

REFORMA POLÍTICA

Karina Sosa, diputada suplente del FMLN; Francis Hasbún y Héctor Dada Hirezi, doctor y diputado de Cambio Democrático (CD), integran este equipo para plantear reformas al Estado y modernización del mismo.

“No es lo mismo recibir un gobierno con una recaudación proyectada que una recaudación real.”

Mauricio Funes, presidente electo

El presidente electo del FMLN, Mauricio Funes, confía en que las medidas que contempla su Plan anticrisis no tendrá que sufrir modificaciones a raíz de los impactos que ya están registrando las cuentas de El Salvador como resultado de la crisis económica internacional, pero sí se requieren recursos, además de la eficiencia presupuestaria, las opciones son acudir al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y a una política de créditos con organismos multilaterales.

De acuerdo con datos del Banco Central de Reserva (BCR) retomados por el Grupo de Apoyo al Diálogo Fiscal (GADF), que elaboró el documento que plantea la necesidad de un diálogo fiscal, solo en enero la recaudación cayó un 11.6% y la carga tributaria registró un retroceso hasta un 13% del PIB al cierre de 2008, y ya se arrastra un déficit de 0.3% del PIB en las cuentas públicas.

Ante estos datos y la posibilidad de encontrar unas finanzas mermadas y problemas de liquidez en el Estado, el reto que enfrenta ahora el equipo de gobierno del presidente electo es decidir si tendrán que utilizar el fondo precautorio que le aprobara el FMI a El Salvador en enero pasado, y que le da la posibilidad de acceder a $800 millones en los próximos 14 meses.

“Eso lo deberá discutir este equipo: si habrá necesidad de utilizarlos o no, pero también definir una política crediticia de Estado”, expresó ayer el presidente electo al confirmar que el mismo presidente Antonio Saca le informó, a través de una llamada telefónica, que el pago de tributos había caído en el inicio de año.

“Ese es un dato que necesita conocer esta mesa porque sobre esa base puede hacer proyecciones, construir y ser sensatos en la planificación, porque no podemos tampoco hacer proyecciones sin tener claro los números y cómo vamos a recibir el Gobierno”, afirmó Funes, quien; sin embargo, descarta que en esa definición de prioridades su Plan anticrisis pueda verse afectado. Para él, las medidas propuestas son “más vigentes y urgentes”, por lo que no descarta buscar que algunas sean implementadas por el gobierno de Saca antes de finalizar su mandato.

Pero para tener el aval para usar los $800 millones, el Gobierno deberá cumplir algunos compromisos ante el FMI: mantener el déficit fiscal en 2.8% del PIB, reducir el subsidio a la electricidad, aumentar la recaudación y eficientizar el gasto, entre otras condicionantes.

La otra opción planteada ayer por Funes fue la creación de una política de créditos que abra el acceso con organismos multilaterales. “Debemos definir y construir una política de endeudamiento pactada con la Asamblea Legislativa, necesitamos que sea una política de Estado”, insiste el reconocer que eso requerirá del apoyo de la nueva oposición arenera.

Las otras opciones para financiar las medidas anticrisis es reorientar el presupuesto en algunas partidas específicas, agilizar la inversión pública y definir una política de acceso a crédito para la micro y pequeña empresa.