Areneros tienen distintos puntos de vista con la realización de elecciones primarias: unos consideran que deben desecharse por completo y prohibirlas tajantemente con reforma a los estatutos; otros hacen un llamado a regularlas y celebrar “verdaderas primarias”.

“Se habla de que no son primarias y tienen toda la razón, las primarias son una elección con votación secreta y más democracia”, dice el ex presidente Armando Calderón Sol, al referirse a las quejas escuchadas en consultas a las estructuras. Sin hablar de reformas estatutarias, apoya un cambio en la forma de selección de candidatos.

“No quieren más elecciones primarias”, expresa Norman Quijano, vocero y alcalde electo de San Salvador, al leer las inquietudes de las bases que se quejan de la división que generó el proceso interno del cual salió electo Rodrigo Ávila.

El tema de las primarias, a través de reforma a estatutos, también fue un dilema en 2003, cuando ARENA se preparaba para las elecciones presidenciales de 2004. Antonio Saca fue el primer candidato electo en un proceso que quedó regido a través de manual, y muy lejos de establecer reglas por estatuto.