“Hablar de tasas de impuestos en un pacto fiscal no es solución, peor en una crisis.”

Jorge Daboub, presidente CCIES

“Hay que buscar la reactivación económica antes de pensar nuevos impuestos.”

Napoleón Guerrero, presidente ASI

“Este no es el momento de ponerle más cargas a los trabajadores y empresas.”

Federico Colorado, presidente ANEP

“No tenemos grandes recursos naturales y los ingresos estatales son de los impuestos.”

Agustín Martínez, presidente CAMAGRO

“El tema fiscal es preocupante, pero creemos que toda propuesta debe ser analizada.”

Mario Rivera, presidente CASALCO

“Es indispensable una revisión inmediata y exhaustiva de los gastos del Estado.”

Armando Arias, presidente ABANSA

Para varios analistas e institutos de pensamiento, la llegada de un nuevo inquilino a Casa Presidencial, con un escenario financiero complicado, podría ser el impulso irrefrendable para alcanzar un acuerdo fiscal; no obstante, los empresarios —en su mayoría— tienen sus reservas en este tema.

Sara Verónica López/ Claudia Ramírez/Mariana Belloso/Karla Ramos/ Lourdes Quintanilla
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Pacto fiscal sigue siendo una palabra que genera diferentes reacciones en la sociedad salvadoreña. Y hablar de pacto fiscal en momentos en que, por un lado, la crisis económica mundial golpea a los diversos sectores productivos; y por el otro, las carteras estatales van reconociendo, una a una, sus raquíticas posibilidades financieras para seguir adelante con sus proyectos, el tema se antoja cuesta arriba.

El sector privado, representado en seis de sus principales gremiales, externó su posición en torno a esta posibilidad, que ronda el ambiente desde hace años, pero que ha cobrado fuerza con la llegada de un nuevo gobierno. Las gremiales reconocen que el Estado requiere de acciones apremiantes para llevar más recursos a sus arcas, pero la mayoría de gremiales convocadas al Foro Económico de LA PRENSA GRÁFICA, realizado la semana pasada, no cree que sea a través de un pacto fiscal que el país resuelva el problema de los exiguos ingresos del Estado.

“No tengo mucha fe en los pactos fiscales”, sostuvo Jorge Daboub, presidente de la Cámara de Comercio e Industria de El Salvador (CCIES). “Creo que generalmente son una discusión ideológica y eso no nos permite llegar a soluciones técnicas”,  agregó el empresario, para quien primero se tiene que hablar de medidas contra la elusión y evasión fiscal.
En el mismo sentido se pronunció Napoleón Guerrero, presidente de la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI).
“Hoy por hoy, en las economías desarrolladas lo que están tratando de hacer es devolverles más capacidad adquisitiva a los consumidores… No creo que en nuestro país se vaya a aplicar una medida totalmente diferente que daría resultados totalmente diferentes”, valoró.

En tanto, Federico Colorado, presidente de la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP), aseguró que están abiertos a dialogar al respecto, pero adelantó que “en la situación actual”  creen que “la apuesta tiene que ir en otro sentido”, enrumbada a incentivar.

A continuación, Agustín Martínez, presidente de la Cámara Agropecuaria y Agroindustrial de El Salvador (CAMAGRO), y Mario Rivera, presidente de la Cámara Salvadoreña de la Industria de la Construcción (CASALCO), acompañaron la visión de explorar primero acciones como el combate al contrabando y ampliar la base tributaria antes de apretar por el lado de más impuestos.

“Hay que tener la conciencia de austeridad en el gasto (público) mucho se puede lograr, y sobre todo focalizar esfuerzos, por ejemplo, en subsidios”, sostuvo Martínez. “El tema fiscal es bastante difícil y preocupante, pero creemos que cualquier propuesta que se haga debe ser analizada profundamente”, afirmó, a su tiempo, Rivera.
Banca “pragmática”

La voz que contrastó el concierto de la cautela empresarial ante la posibilidad de más impuestos concebidos como producto de un pacto fiscal, provino de la banca. Armando Arias, presidente de la Asociación Bancaria Salvadoreña (ABANSA), valoró apremiante este tipo de entendimientos, en momentos en que el Estado ve complicado el financiamiento a los proyectos sociales.
“Nosotros sí creemos que un pacto fiscal es conveniente y saludable para el país, tenemos que ser muy pragmáticos en este momento y darnos cuenta que el tema electoral terminó el 15 de marzo”, expresó Arias, al agregar que cree que este entendimiento podría demorar más tiempo de lo que las necesidades están demandando en estos momentos.

“Creemos que simultáneamente a elaborar el pacto fiscal con todas las fuerzas vivas, el Gobierno va a tener, o tiene ya, los mecanismos necesarios para tomar medidas inmediatas en relación con el tema fiscal”, agregó. Y esas medidas, a juicio, deben estar relacionadas a hacer que todas las personas paguen sus impuestos y a incluir al sector informal en la base de contribuyentes, entre otros. “Esto requerirá que la administración tributaria se fortalezca”, señaló.

Y si  bien es cierto que el gobierno entrante no ha dicho que aumentará los impuestos, instituciones como la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (FUSADES), la Fundación Nacional para el Desarrollo (FUNDE) y el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI) han reiterado desde años atrás la necesidad de un pacto fiscal.

De hecho, existe un documento denominado: “El Salvador necesita diálogo y entendimientos fiscales”, elaborado por cinco reconocidos analistas, quienes han insistido en la urgente necesidad de que el nuevo gobierno enfrente el reto de crear un entendimiento fiscal entre partidos políticos, empresa privada, trabajadores y Gobierno en donde se acuerde, tras un diálogo franco, los mecanismos fiscales a aplicar para dar holgura financiera al Estado.

El diagnóstico del documento señala que el país se arriesga este año a ver caer su crecimiento en un 4%. Ya el presidente Antonio Saca hacía referencia, la semana pasada, a un crecimiento del producto interno bruto (PIB) que podría alcanzar 0.5% al final de 2009. A enero, el fisco presentaba un déficit de $72 millones (0.3% del PIB).
“Estamos dispuestos a discutir el tema, pero soy un tanto escéptico, aunque estoy abierto a esa discusión”, añadió Federico Colorado, pero a su juicio, lejos de considerarse más impuestos lo que funcionaría mejor serían medidas de estímulos a la producción en tiempos de crisis. (Ver nota a parte).

Medidas de estímulo al estilo EUA

En tiempos de crisis, lejos de pensar en acuerdos, pactos o entendimientos fiscales, que implicarían pagar más impuestos, y recortar subsidios, entre otros, el sector privado visualiza necesario los estímulos fiscales.

“No es momento de ponerle más carga con impuestos a trabajadores y empresarios, sino que lo que corresponde es ver cómo apoyamos a los sectores productivos, cómo estimulamos la demanda”, recomendó Federico Colorado, presidente de la ANEP. “Es que en eso del tema de los apoyos a los sectores hay que voltear a ver lo que están haciendo en EUA, en Europa, donde la casa se les está cayendo entonces qué es lo que hacen ellos, no permiten los gobiernos que la casa se les caiga”, dijo.

A su juicio, es importante mantener los estímulos fiscales, por ejemplo al sector exportador, cuestionado por recibir aún el “draw back”, un incentivo que la Organización Mundial del Comercio (OMC) no aprueba.
“El estímulo fiscal, nosotros lo entendemos como un apoyo que se da para reactivar un sector económico que está pasando por un mal momento”, sostuvo el presidente de la ANEP.

Al igual que Colorado, Jorge Arriaza, presidente de la ASI, destacó la estrategia de EUA. “Yo no sé por qué en este país es pecado mortal hablar de estímulos o subsidios, estamos viendo, y ya Lico (Federico Colorado) me quitó las palabras de lo que están haciendo los países desarrollados”, expresó Guerrero.

Al argumento se sumó Armando Arias, presidente de ABANSA. “Yo me quedaría con el mensaje de que los estímulos en estos momentos son importantes para que despeguen sectores que han sido afectados por la crisis”, sostuvo Arias.
“Los países  que quieren salir adelante en estos momentos están recortando impuestos, amén de los mismos problemas fiscales que tienen”, manifestó Jorge Daboub, presidente de la Cámara de Comercio.