Lo que hace falta en ARENA es ver que su candidato se conduce como líder y empezar a socavar el mito de la inevitabilidad del triunfo del FMLN.”

Los planes de gobierno sirven para gobernar, no para ganar elecciones. Sí importa la habilidad de sintetizar en fórmulas lo que la gente quiere saber.”

La elección la van a decidir los mismos que la vez anterior (indecisos). ARENA ganaría si y solo si convence que no será más de lo mismo.”

Ningún plan de gobierno ha generado movimiento de balanza; el público no entiende ni le importa. La percepción del electorado es la que decide.”

Estela Henríquez/Héctor Silva
politica@laprensa.com.sv

Una campaña electoral adelantada, discursos vacíos, ofrecimientos de cambio en los partidos y dos candidatos que aún no presentan soluciones a los problemas más importantes del país son algunos de los puntos que destacaron los analistas invitados al cuarto Foro Político organizado por LA PRENSA GRÁFICA.

Rafael Castellanos y Joaquín Samayoa, columnistas de LA PRENSA GRÁFICA, ofrecieron sus análisis del proceso electoral que está generando más expectativa en los comicios presidenciales, opacando las legislativas que, a juicio de ambos, serán decisivas para el futuro del país, independientemente de cuál partido llegue al Ejecutivo.

La campaña inició con el anuncio de la fórmula efemelenista en septiembre de 2007. Sin embargo, después de 10 meses de mensajes electorales, los analistas no encuentran propuestas ni en el candidato del Frente, Mauricio Funes, ni en Rodrigo Ávila, de ARENA, quien entró al ruedo meses después.

“Hasta ahora, cuando uno mira los planteamientos de los dos candidatos, es casi como que están queriendo tomarle el pelo a uno. Hay una lista interminable de ofrecimientos, claro, todos estamos a favor de pensiones más altas… El tema es si es posible hacer las cosas o no”, manifestó Samayoa al considerar que se deben tener posiciones concretas, que el candidato debe ser capaz de “tener un análisis más lúcido de las causas del problema y qué se va hacer para solucionarlos”.

Ambos coinciden en que un plan de gobierno no es fundamental para ganar votos y que la preocupación de ARENA y FMLN, ahora, es más de mensajes electorales. “Lo más importante es la percepción que tenga el electorado”, recuerda Castellanos.
Apertura

A pesar de los esfuerzos y discursos que los dos partidos mayoritarios y sus candidatos hacen por mostrarse más abiertos, los analistas consideran que este cambio debe ser visualizado con decisiones más concretas para ganar la confianza y el voto de los indecisos que esperan un ARENA y un FMLN distintos para decidir su voto.

“Si el Frente logra convencer que es mentira lo que la gente pensaba y que la dirigencia se ha convertido; que el ‘predicador’ Mauricio Funes, logra convencer de que se moderará; y que el modelo que implantarían no sería el de Chávez, ganaría”, expresó Castellanos, al hablar de las dudas que todavía hay en torno al cambio que el FMLN ha querido mostrar con el candidato, quien presenta un discurso ambiguo en ese tipo de temas.

“ARENA ganaría si, y solo si -y la tiene difícil con 20 años de desgaste- logra convencer a esos 750,000 que no va ser más de lo mismo, que hará una alianza amplia y que ha cambiado la manera de hacer política”, agregó, al plantear los cuestionamientos sobre la reingeniería que promete implementar Ávila a su partido y que ha sido afectada por decisiones de las gestiones areneras.

Samayoa dibuja un escenario con dificultades para ambos partidos. Coincide en que ARENA tiene el lastre del desgaste de cuatro gobiernos: “Más allá del voto duro del Frente hay una cantidad significativa de personas que están muy, muy hartos de ARENA, eso no es fácil de modificar”, opina. Insiste que las señales de real apertura en este partido serían las que podrían incidir de forma positiva en la percepción de la gente.

A su juicio, ARENA tiene la oportunidad de mostrar su cambio no sólo con el nombramiento de un foráneo en la candidatura a la Vicepresidencia -que es una de las decisiones que están a punto de tomar-, sino también reflejarla en la presentación de su oferta legislativa: “Lo que ARENA necesita son acciones muy concretas que prueben que el cambio es real. En las diputaciones hay una gran oportunidad”, consideró. Agrega que si Ávila no logra convencer que su gestión será distinta a los gobiernos precedentes y que está dispuesto a generar una verdadera revolución en el partido tricolor, no tiene probabilidades de remontar la ventaja que ha ganado el FMLN.

El tema de la unidad partidaria y la percepción de divisiones internas en cada uno de estos partidos no es, para los analistas, un punto que genere cambios en las preferencias electorales, pero sí un lamentable desgaste interno.