En el primer trimestre, el país no cumplió uno de los requisitos fundamentales para mantener el préstamo precautorio con el Fondo Monetario Internacional (FMI): el nivel de déficit.

“El acuerdo no está vigente porque no se cumplió la meta de 2.8% de déficit a marzo”, confesó Eduardo Ayala Grimaldi, secretario técnico de la Presidencia, quien dejará el cargo el lunes.

Datos oficiales revelan un déficit de $241.3 millones hasta abril, un incremento de casi el 6% a lo presupuestado en 2008.

“No estaba previsto originalmente que existiera; entonces, ese déficit que subió nos superó la meta, que era requisito del acuerdo”, explicó Ayala.

El problema es que el FMI seguirá evaluando el desempeño antes de aprobar el préstamo. De este modo, se pierde esta garantía de liquidez en el sistema.

“Mientras el fondo no esté vigente, no podemos hacer uso de los recursos”, explicó Grimaldi. Esto significa que “si llegara a haber corrida de depósitos (en los bancos), se pueden sacar los $800 millones, pero en este momento no lo podríamos hacer”, agregó el funcionario.

El FMI también tiene que volver a realizar un nuevo cálculo de déficit, con panoramas diferentes, según el gobierno entrante, haga o no algo por reducir la brecha fiscal. Regresarán en junio ya con las cifras preparadas.