“La democracia cristiana no es un partido de derecha”, afirma de forma contundente un líder local de ese instituto político. Esta persona prefiere el anonimato para no generar “escozor” en sus compañeros que han comenzado a negociar con ARENA la alianza democrática de la que habló hace unos días el presidente de la República, Antonio Saca.

Este dirigente prevé, entonces, que el esfuerzo de la cúpula no tendrá eco en buena parte de las bases con el fin de evitar que el próximo 15 de marzo algunos pedecistas voten por el FMLN, “independientemente de lo que la dirección decida”, afirmó.

Pero si la decisión del PDC de retirarse de la contienda presidencial no es garantía para ARENA, tampoco lo es para el FMLN.

“Las bases experimentan una leve división, por el momento”, expresó otro de los miembros del directorio político del PDC, quien explicó que el partido aún define hacia dónde inclinará la balanza, aunque el jefe municipal de San Miguel, Wilfredo Salgado, puede ayudar a inclinar para uno u otro partido el voto del PDC.

“Mientras no haya un consenso y una definición concreta de qué se hará, nuestro voto no tendrá el valor que se requiere”, manifestó esta fuente al asegurar que “es muy prematuro” aceptar o descartar probabilidades.

Ambos pedecistas, desde distintas trincheras, opinaron que hay bases que quieren apoyar a la izquierda y la consideran más cercana a la ideología demócrata; mientras otros prefieren un pacto con ARENA, con quien creen se puede lograr una negociación más institucional.