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Participación electoral

54% El mínimo de participación electoral esperado para hoy, según una encuesta realizada por LPG Datos hace tres semanas. En el escenario más optimista, votaría arriba del 80% de los ciudadanos.

El Tribunal Supremo Electoral (TSE) se declaró ayer listo para atender una afluencia masiva de salvadoreños a los 460 de votación autorizados en los 262 municipios

La última encuesta realizada por LPG Datos, hace tres semanas, mostró que los salvadoreños tienen mucho interés en votar.

La participación electoral, según la investigación, será de un mínimo de 54% y de un máximo de 81%.

A los ciudadanos se les preguntó si asistirían a votar a las elecciones municipales y legislativas, y si estaban muy seguros de hacerlo.

El 81.4% dijo que iría a votar, pero solo el 69.6% señaló que estaba muy seguro de ir; entre estos últimos, el 54.2% ya había decidido por quien votar.

Las personas con mayores probabilidades de ir a votar son aquellas que tienen plena convicción y que ya ha sido convencidos por un partido político o candidato. En ese sentido, los ciudadanos que dudan de asistir a votar o que no saben por quién hacerlo son los más propensos a no asistir a las urnas hoy.

Este supuesto nos permite dibujar tres escenarios de participación electoral: alto, medio y bajo.

En el primer caso, asisten a las urnas todas las personas con la intención mínima, y se llega a una participación récord de más del 80%.

En el caso de que las persona con dudas se queden en casa, solo asiste a votar el 69%, una cifra ligeramente mayor a la presidencial de 2004.

Si no asisten a votar las personas que dudaban asistir o a quien apoyar, entonces solo llega el 54.2%, que es similar a la votación de las elecciones de 2006.

¿Quiénes son los mas propensos a no asistir? LPG Datos ha comparado el perfil sociodemográfico de los votantes salvadoreños con el perfil de las personas que asistieron a las urnas en 2006 para determinar quien es más propenso a no votar.

La información muestra que buena parte de los absentistas están entre las mujeres, en particular las amas de casa. Estas son casi el 30% de la población, pero solo el 16.3% salió a votar en 2006.

El absentismo también lo engrosan las personas más jóvenes y las de 56 años o más. El día de las elecciones, son las mujeres y las personas mayores las más propensas a quedarse en casa al cuidado de los niños.

En general, las personas más dubitativas de votar son las de menores ingresos, las de menos educación, las que no tienen un empleo fijo, las católicas y quienes tienen compromisos familiares formales.