En junio fue asesinada una mujer cada 16 horas, según un informe de ISDEMU. En 2015 la violencia feminicida tuvo una escalada alarmante, con 574 muertes ese año y 524 en 2016.
Susana Peñate
En junio de este año, una mujer fue asesinada cada 16 horas, registrando 45 muertes en ese mes, uno de los más violentos reportados en el primer semestre de 2017 de acuerdo con el Informe del “Estado y situación de la violencia contra las Mujeres en El Salvador 2017”, presentado ayer por el Instituto Salvadoreño para el Desarrollo de la Mujer (ISDEMU), en el marco de la conmemoración del Día de la No Violencia contra las Mujeres, determinado para cada 25 de noviembre. En los primeros seis meses del año, se reportaron 201 mujeres asesinadas. Sin embargo, la PNC reporta que hasta el 22 de noviembre se reportó la muerte violenta de 422 mujeres. Y la cifra va en aumento: ayer mataron a tres mujeres, dos de ellas madres (ver nota en página 14).
El informe de ISDEMU señala que a partir de 2015 hubo una escalada en la “violencia feminicida”, reportando 574 muertes violentas de mujeres, superando significativamente a las 294 del año anterior y a las 217 de 2013. El año pasado se tuvo una leve reducción, al reportar 524 mujeres asesinadas. Este año hubo 19 en enero, 28 en febrero, 44 en marzo, 32 en abril, 33 en mayo y 45 en junio.
“Porque si las víctimas no están protegidas ni se sienten protegidas, ellas no denuncian, no va a denunciar a su papá, a su padrastro, a su tío, el proveedor de la casa”.
Vanda Pignato, secretaria de Inclusión Social
Los datos del Observatorio de la Violencia contra las Mujeres de ORMUSA indica que de enero a octubre de 2017 hubo 395 feminicidios. “En estos feminicidios destacan 13 mujeres asesinadas por sus parejas, incluyendo los últimos tres casos sucedidos el 19, 22 y 25 de octubre: la señora asesinada frente a sus hijos en la vía pública en Apopa, la señora asesinada frente a sus tres hijos en Puerto Parada, Usulután, y la joven embarazada de ocho meses, la cual se presume fue asesinada por el padre de su futuro hijo, que no quería que naciera”, dice en su sitio web.
ORMUSA desglosa que hubo 38 muertes violentas en julio, 37 en agosto, 66 en septiembre y 53 en octubre de 2017. El tipo de arma más utilizada fue la fuego, seguida de asfixia por sofocación, asfixia por estrangulación, arma cortocontundente, cortopunzante, asfixia por sumersión y arma blanca.
El informe de ISDEMU añade que los departamentos donde se ubicaron los hechos de violencia que terminaron con la vida de estas mujeres, se detectó que el 33 % ocurrió en el departamento de San Salvador, el 13 % en San Miguel, el 9.5 % en La Paz y el 9 % en Sonsonate, el resto se distribuye en los demás departamentos del territorio.
De acuerdo con la Ley Especial Integral para el Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia (LEIV), en su artículo 9, la violencia feminicida “es la forma extrema de violencia de género contra las mujeres, producto de la violación de sus derechos humanos, en los ámbitos público y privado; conformada por el conjunto de conductas misóginas que conllevan a la impunidad social o del Estado, pudiendo culminar en feminicidio y en otras formas de muerte violenta”.
“Porque las mujeres que han sido víctimas de violencia sexual han pasado por la violencia física, emocional, simbólica y por supuesto la violencia sexual”.
Yanira Argueta, directora de ISDEMU
“Solo en el primer semestre del año fueron asesinadas más de 200 mujeres. Si bien ese dato es preocupante, muestra la gravedad de la violencia contra las mujeres, llevada a su manifestación más extrema como lo es el feminicidio. Y no podemos olvidar que hay jueces y juezas que aún no tipifican como feminicidio”, dijo Vanda Pignato, secretaria de Inclusión Social y presidenta del ISDEMU.
El informe agrega que hay un progresivo incremento en la calificación de hechos como feminicidios, pasando del 61.15 % en 2015, 66.60 % en 2016 a 72.64 % en 2017. No obstante, en promedio, el 9 % de los casos iniciados por el delito de feminicidio fueron sentenciados y aumenta a 15.5 % si se suman los hechos que fueron procesados como homicidio de mujeres, agrega el informe. Del total de 290 casos judicializados como feminicidios de 2015 a junio de 2017, en 59 hubo sentencias condenatorias y en 18 sentencias absolutorias.
“Pese al trabajo realizado por las instituciones, el informe revela que la labor por la erradicación de la violencia contra las mujeres sigue siendo una labor cuesta arriba”, manfiestó Pignato.
Violencia sexual
Yanira Argueta, directora de ISDEMU, también señaló que hace falta hacer tipificaciones más adecuadas de los delitos contra la mujer, en particular delitos de índole sexual. “No podemos solo tipificar un tipo de violencia porque para las mujeres que han sido víctimas de violencia sexual han pasado por la violencia física, emocional, simbólica y por supuesto la violencia sexual”, dijo.
“Nos encontramos con una mujer de muy bajo nivel educativo, que no sabe leer y escribir bien, pero que la tecnología de la información la ha acercado al mundo actual”.
Ana Sandra Aguilar, investigadora UTEC
La violencia sexual es el tipo de violencia que más afecta a las niñas, adolescentes y mujeres en edad reproductiva. En 2016, se reportaron 5,970 casos de niñas, adolescentes y mujeres que fueron víctimas de delitos contra la libertad sexual. La Fiscalía General de la República recibe un promedio anual de 6,000 casos.
El miedo limita a las víctimas de delitos sexuales a no hacer las denuncias. “No están seguras en la casa, no están seguras en los espacios públicos. Muchas veces en las escuelas, iglesias, o sea, que la situación realmente es dramática y de ese 6,000 yo me atrevería a que es tres, cuatro veces más el número”, expresó Pignato.
Las inscripciones maternas de niñas y adolescentes en 2015 fueron de 25,021 en el sistema de salud y en el 2016 fueron de 21,467, que representa un 22.63 % del total de inscripciones maternas, agrega el informe. Enfatiza que de acuerdo con el marco legal, toda relación sexual con una menor de 15 años constituye una violación y entre 15 y 18 años, constituye delito de estupro.
“La educación no ha sido del todo la requerida para que ellas puedan ganarse su vida, poder tener acceso a ingresos a través de un empleo o del autoempleo”.
Noris Isabel López, vicerrectora de Investigación UTEC
De acuerdo con las estadísticas que ISDEMU retomó de la Fiscalía, en 2015 se reportaron 3,878 niñas y adolescentes de entre 0 y 17 años víctimas de delitos contra la libertad sexual; número que se incrementó a 4,343 para el mismo grupo etario en 2016.
“Desde el ISDEMU hacemos un llamado a toda la sociedad y especial a las instituciones encargadas de la atención y protección de las niñas y adolescentes, para que tomen las medidas necesarias para la erradicación de la violencia sexual. Y aún nos falta mucho por el camino, porque necesitamos también crear realmente un plan de protección a las víctimas”, dijo Pignato.
Destacó como avance la instalación de 88 unidades de atención especializada a mujeres que enfrentan violencia, que acercan los servicios de atención.
574: mujeres que fueron asesinadas en 2015, clasificadas como violencia feminicida.
59: sentencias condenatorias por el delito de feminicidio desde 2015 a junio de 2017.