Los principales representantes del empresariado del país le dan su voto de confianza al presidente electo. Esperan que sus palabras pronto se conviertan en hechos, que sus primeras medidas sean para reducir los impactos de la crisis y que sea coherente en la elección de su gabinete.

Para varios analistas e institutos de pensamiento, la llegada de un nuevo inquilino a Casa Presidencial, con un escenario financiero complicado, podría ser el impulso irrefrendable para alcanzar un acuerdo fiscal; no obstante, los empresarios —en su mayoría— tienen sus reservas en este tema.

Mauricio Funes reiteró que no revertirá la dolarización porque la crisis económica exige otro tipo de medidas, y entre ellas la necesidad de generar confianza.

El candidato del Frente reconoce que obtener financiamiento externo no será lo más fácil, pero  sostiene que su partido no tendrá inconveniente en aprobar nuevos créditos, una de sus principales apuestas para alimentar de ingresos al Estado. Karla Ramos/Héctor Silva/Alexandra Bonilla “Yo voy tras los evasores, tras los contrabandistas, tras los que aprovechan los tráficos […]

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