Funes aboga ante empresarios por abrir “oportunidades” a pandilleros

El mandatario dijo a los empresarios que para dar estabilidad al pacto de pandillas y la reducción de homicidios es necesario ofrecer oportunidades a los jóvenes que los alejen de la criminalidad. Enfatizó ante los empresarios que las actividades ilícitas de las pandillas están directamente relacionadas con la necesidad de sostener a sus familias.

El presidente de la República, Mauricio Funes, se mantiene reunido esta tarde con representantes de gremiales empresariales, en busca del establecimiento de un acuerdo nacional contra la violencia que permita, entre otros objetivos, la generación de empleos para jóvenes en riesgo y pandilleros en rehabilitación.

El mandatario resaltó ante los empresarios algunas iniciativas que su Gobierno impulsa para generar trabajo en el país, para lo que, asegura, se necesita el apoyo de la empresa privada. Una de estas iniciativas es la creación del pacto nacional para la creación de empleos.

Funes argumentó ante los empresarios la necesidad de tener una estrategia efectiva de prevención, orientada a eliminar las pandillas en el país y a darle sostenibilidad al pacto entre pandillas y a la reducción de homicidios. Proporcionarles una fuente de ingresos digna y legal, dijo, va en ese camino. Enfatizó ante los empresarios que las actividades ilícitas de las pandillas están directamente relacionadas con la pobreza y la necesidad de recursos. “Nosotros no tenemos un Chapo Guzmán… Las pandillas se han vuelto criminales para hacer llegar recursos a sus familias”, indicó, al tiempo que dijo que “como Estado, como país, tenemos que abrirles oportunidades” a estos grupos que viven de la criminalidad.

Descató los resultados de la tregua pactada entre pandillas, en la cual, insistió, el sólo solo sirvió como facilitó el entendimiento, y dijo que actualmente se ha logrado reducir en un 55% los índices de homicidios. Estas nuevas cifras, tendientes a la baja, han colocado al país en una posición diferente respecto al mapa de la violencia. El Salvador, dijo, ya no es el país más violento del continente y recordó que ese mensaje lo externó en la pasada cumbre de Cartagena (Colombia), debido a que asegura era necesario que los 900 empresarios que estaban presentes escucharan ese dato. “Estamos ante un escenario diferente y podemos exhibirlo ante el mundo”, aseguró.

“El problema es que tenemos que darle estabilidad a esto. No podemos depender de que el acuerdo este sujeto a que las pandillas logren un entendimiento entre ellas…

La única manera de darle sostenibilidad es articulando una política preventiva que permita quitar el semillero a estas organizaciones pandilleriles…No digo poner en libertad a los pandilleros, pero sí podemos frenar el reclutamiento de ofreciendo oportunidad a los jóvenes”, aseguró.

Funes expuso que la mayoría de los más de 20 mil pandilleros son jóvenes provenientes de zonas alto riesgo delincuencia; jóvenes que no han tenido otro camino más que irse a los Estados Unidos a trabajar o involucrase en las pandillas. En este sentido, el presidente pidió a los empresarios crear oportunidades laborales y dar capacitación profesional a los jóvenes del país en riesgo o metidos en pandillas, pero que no han sido condenados por algún crimen.

El mandatario, sin embargo, aseguró a los privados que el Gobierno no renunciado al combate de las pandillas, así como tampoco ha renunciado a una política de prevención.

“El Gobierno no ha negociado con las pandillas. No hemos acordado ningún beneficio especial para ellos (los reos). Lo que estamos viendo en los centros penales es resultado de la Ley Penitenciaria. También reiter que el retiro de los militares de los registrados al interior de los penales fue para reacomodarlos en los perímetros”, expresó ante los empresarios.

Por otra parte, el presidente consideró que no se puede señalar que el sistema de seguridad nacional ha fracasado en sus estrategia en tanto no se cuentan con las herramientas y recursos para combatir el crimen organizado y narcotráfico. “Tenemos siete lanchas que no pueden alcanzar otras lanchas o submarinos de narcotraficantes…No tenemos aviones para perseguir narcotraficantes, ni siquiera para el show aéreo sirven”, expresó.

Esta es la primera reunión con los representantes de las gremiales empresariales que lleva a cabo en el marco del establecimiento de un acuerdo nacional contra la violencia. La idea, ha dicho el gobierno, es que en esta iniciativa se involucren todas las fuerzas sociales, políticas y económicas del país.

En la reunión participan los presidentes de la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP), de la Cámara Salvadoreña de la Industria de la Construcción (CASALCO), de la Asociación Salvadoreña Industrial de El Salvador (ASI) y de la Cámara de Comercio e Industria, entre otros.

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