Un 15 de octubre de 1984 en la ciudad de La Palma, Chalatenango, se dieron los primeros destellos de luz para poner fin al conflicto armado, un ideario del pueblo salvadoreño logrado finalmente el 16 de enero de 1992, hace 20 años.
Escrito por Amadeo Cabrera/Amílcar Mejía
La Asamblea Legislativa ha declarado 2012 como Año del XX Aniversario de los Acuerdos de Paz con motivo de celebrarse el vigésimo aniversario de la suscripción del Acuerdo que puso fin al conflicto armado entre tropas regulares y la antigua guerrilla del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).
El congreso aprobó por unanimidad de sus diputados y con dispensa de trámites en su última sesión plenaria de 2011 el decreto para celebrar un año más de la suscripción de los Acuerdos de Paz ocurrida el 16 de enero de 1992 en el Castillo de Chapultepec, México.
El decreto encomienda además “al Ministerio de Educación para que durante el año lectivo, en todos los niveles educativos en las asignaturas correspondientes, se desarrollen actividades de estudio y reflexión sobre los Acuerdos de Chapultepec, buscando generar una cultura de paz”.
La iniciativa que dio vida a la promulgación del decreto busca “propiciar las condiciones legales para mantener vivo el espíritu de aquel hito histórico y fomentar su conocimiento y reflexión en las generaciones que vivimos el conflicto, como también de aquellas que nacieron y crecieron en la paz (…)”.
El presidente del congreso y diputado efemelenista, Sigfrido Reyes, explicó tras la aprobación del decreto que el parlamento celebrará una sesión solemne el próximo 16 de enero en la tarde para conmemorar los 20 años de la firma del Acuerdo de Paz.
El acuerdo de Ginebra del 4 de abril de 1990 establecía que las negociaciones entre el Gobierno y la comandancia general del FMLN, además de tener como objetivo “terminar con el conflicto armado por la vía política al más corto plazo”, también contemplaba “impulsar la democracia del país, garantizar el irrestricto respeto a los derechos humanos y reunificar la sociedad salvadoreña”.
Los esfuerzos por la pacificación de El Salvador iniciaron en 1984 con la administración del entonces presidente democristiano José Napoleón Duarte, que logró la primera reunión de diálogo el 15 de octubre de ese año en la población de La Palma, enclavada en el norteño y en ese entonces conflictivo departamento de Chalatenango.
Pero tras dos nuevas rondas de diálogo con los rebeldes, Duarte no logró la pacificación del país, en un proceso donde la Iglesia católica salvadoreña tuvo su rol como mediadora principal.
El 1.º de junio de 1989, el empresario Alfredo Cristiani asume la Presidencia de la República tras ganar la elección como candidato de la conservadora Alianza Republicana Nacionalista (ARENA).
En su discurso de toma de posesión, el gobernante anunció que su gobierno buscaría la paz bajo la mediación de la Organización de Naciones Unidas (ONU), y para lo cual nombró una comisión gubernamental de diálogo.
Ahora ARENA, bajo cuya administración del Ejecutivo se logró el histórico acuerdo que puso fin a más de una década de enfrentamiento armado, celebra la decisión del parlamento. “La democracia es el mejor camino que nosotros como pueblo pudimos haber escogido como forma de vida, y ello nos está permitiendo que los que anteriormente estaban alzados en armas para llegar al poder, hoy estén en el poder pero con responsabilidad y bajo un régimen democrático”, valora el jefe de bancada arenera en el congreso y director de asuntos políticos del COENA, Donato Vaquerano.
El FMLN, uno de los actores directos en la mesa de diálogo-negociación con el Gobierno, también se muestra jubiloso por otro año más de la firma de los Acuerdos de Paz. “Para nosotros lo más importante era terminar la guerra y buscar la paz y eso es lo que hemos estado haciendo: construyendo esos Acuerdos de Paz por 20 años donde hemos tenido logros importantes como haber ganado el Ejecutivo (e) instalar un nuevo mecanismo de hacer las cosas en el Estado”, pondera el legislador de izquierda y miembro de la Comisión Política del FMLN Santiago Flores.
La celebración por los 20 años de la firma de los Acuerdos de Paz también es muestra de regocijo para GANA. “Es una fecha histórica donde regresa la democracia a nuestro país y que debe de ser un momento propicio para que todos los salvadoreños reflexionemos de lo importante que es vivir en paz y no tener diferencias ideológicas extremistas que son las que le han hecho daño a nuestro país”, dice el segundo vicepresidente del parlamento y director de organización de GANA, Guillermo Gallegos.
El diputado suplente y secretario general de CN, Manuel Rodríguez, por su parte, reflexiona: “Aquí se han callado las armas pero los problemas que suscitaron la violencia no se han logrado solucionar. La guerra que teníamos en el pasado de aspecto ideológico se ha convertido en una guerra totalmente diferente: la inseguridad la sufrimos todos”.