“En el mundial sub 17 de Trinidad y Tobago, la agencia de viajes de Warner se encargó del traslado de las 15 selecciones visitantes. Y todo con la aprobación de Blatter.”

Andrew Jennings,periodista inglés

Durante más de tres décadas, el periodista inglés Andrew Jennings se ha dedicado a perseguir “hombres malos”. Es un defensor de los fundamentos del periodismo de investigación. No publica nada que no tenga un soporte documental. Ha trabajado en la investigación de la mafia londinense y su relación con Scotland Yard, lo que llevó a la publicación del libro “Scotland Yard y su conexión con la cocaína”.

Antes de la copa del mundo de Alemania, publicó “Tarjeta Roja. El libro secreto de la FIFA”. “Fondos de FIFA fueron destinados para imponer una prohibición mundial del libro. Hace casi seis años que no recibo llamadas de sus abogados. Quizá no pueden hacer nada en mi contra”, dijo Jennings en exclusiva a LA PRENSA GRÁFICA.

Al conocer que el presidente de CONCACAF, el trinitense Jack Warner, estará en El Salvador esta noche, se contactó con Andrew Jennings a su casa en Inglaterra para pedirle que elaborara un corto perfil del máximo dirigente del fútbol en la región.

—¿Cómo definiría a Warner?

—Como un cleptómano en serie. Es un promotor, un pez gordo, un amañador, un manipulador, es un hombre cuya capacidad empresarial y desvergüenza nos dice mucho sobre la FIFA.

—¿Cómo llegó Warner a amasar tanto poder?

—En Trinidad y Tobago, afirma ser dueño de centros comerciales, hoteles, oficinas y almacenes. Según le dijo a un periodista, todo lo consiguió “con el salario de las asignaciones que recibí de FIFA. Tengo un dineral”. Desde su ingreso a la federación de Trinidad, el fútbol allí se empezó a gestar distinto.

—¿Cómo entra a FIFA?

—Arrancó de manera desafiante a robar en el fútbol, hace 40 años. En su autobiografía, escrita por un periodista del Guardian de Trinidad y amigo personal suyo, define su ingreso en 1983 a la Unión Caribeña de Fútbol como el momento clave, esto le dio una plaza en el ejecutivo de FIFA, y según el periodista fue “un paso que creaba oportunidades para obtener mayores ingresos”.

Warner es electo presidente de CONCACAF en abril de 1990. En su libro “Tarjeta Roja”, Jennings publica el contenido de un fax enviado por Warner a Zúrich y dirigido al entonces secretario de FIFA, Joseph Blatter: “Permita dejar constancia de mi agradecimiento por el apoyo dispensado durante los últimos meses. Le estaré eternamente agradecido… y deseo transmitirle la garantía de que en todas nuestras acciones, la fidelidad a usted y nuestro presidente, (Joao) Havelange, será de importancia primordial”.

“Warner no le tiene que rendir cuentas a nadie. Hasta George Bush tuvo siempre a alguien a quien rendirle cuentas. Pero a Warner nadie le pregunta nada”, dice Jennings. “Siempre llega a cualquier lado extendiendo una mano. Ha robado todo el tiempo”, agrega.

Cuando Trinidad clasificó a Alemania 2006, Daryll Warner, hijo de Jack Warner, estableció el “Local Organising Company Germany 2006”, una empresa encargada de recaudar los millones de dólares que por patrocinadores generaría el mundial para los “Soca Warriors”. “Jack Warner, que se hace llamar ‘asesor especial’ de la federación, negociaría con los jugadores la distribución de los premios”, dice Jennings.

Un jugador de esa selección mundialista dijo: “El arreglo era para repartir el 50% de las ganancias. Los ingresos eran cercanos a los $20 millones, la distribución tras los números presentados por futbolista era cercana a los $800 por jugador”. Los mundialistas llevaron a corte a Warner y a finales de 2008 arreglaron con la condición de no hablar nada sobre este arreglo. “Un periodista del Guardian de Trinidad, que ha escrito dos biografías de Warner, financiadas por Warner mismo, escribió detalles del arreglo legal. Como así se rompía el acuerdo de confidencialidad, Warner aún no les paga nada a los jugadores”, dice Jennings. “Todos los jugadores que estuvieron en el mundial tienen sus premios, pero este hombre que dice amar al fútbol y a su país les ha robado el dinero a sus héroes.”

A Warner lo pueden ver hoy en el palco presidencial del Cuscatlán.