“El triunfo era para que los aficionados lo disfrutaran. Pero ojo, vamos a Honduras a un partido difícil. Ya pasó lo de México. Queda un partido difícil el miércoles.”

Alfredo Pacheco,defensa de El Salvador

La euforia por la victoria del sábado ante México ya es cosa del pasado. El 2-1 que catapultó a El Salvador al tercer lugar de la hexagonal de CONCACAF y que hundió a los aztecas en el quinto puesto en la clasificación ha quedado atrás para la selección nacional que hoy ya amaneció en Honduras con la mente puesta en conseguir, el miércoles, un resultado que permita seguir aumentando las esperanzas de poder estar presente en Sudáfrica 2010.

Una victoria en el estadio Olímpico Metropolitano de San Pedro Sula es el objetivo principal del técnico de la Azul, Carlos De los Cobos. Sin embargo, el panorama se perfila difícil, sobre todo porque los catrachos tienen sed de revancha después de que no pudieron el sábado salir vivos de su visita a Estados Unidos, donde perdieron 2-1, luego de estar arriba en el marcador por una buena parte del partido. Y además, porque cuentan con apenas cuatro de los 12 puntos que van disputados en la eliminatoria. Es decir, urgen de lograr las tres unidades en disputa para no quedar rezagados, cuando se cierre la primera vuelta de la hexagonal.

Uno de los puntos a favor para De los Cobos y sus muchachos, que viajaron ayer, es que consigo llevan una alta dosis de motivación y confianza después del gane ante los aztecas que llegó como el colofón de una serie de presentaciones que ameritaban en terminar en algo más que en empates o derrotas.

Es por eso que el estratega añadió, antes de emprender vuelo, que su intención no es ir a buscar un negocio o a realizar un juego defensivo que tenga como única opción rescatar un punto, sino que apostará por una sorpresa, que vuelva a poner al combinado cuscatleco en lo más alto de la opinión mundial tal y como sucedió la noche del sábado.

“Honduras tiene buenos jugadores, por lo que va a ser un juego muy disputado y no será fácil en ningún término. Pero nada es imposible en el fútbol. No podemos ir a defendernos porque el que sale a defenderse termina perdiendo. No podemos ser un equipo que salga a defender cuando sabes que en tu área vas a tener gente fuerte y alta”, sintetizó De los Cobos antes de salir hacia San Pedro Sula, donde hoy realizará dos prácticas para mañana reconocer el césped en el que se jugará ante los catrachos.

Alfredo Pacheco, quien ante los mexicanos acabó con un corte en su ceja por un puñetazo de Guillermo Franco, pero que no lo pone en duda para el partido, fue de los que durante la celebración se recordó del juego en el estadio Olímpico y trató de aminorar el triunfalismo que rodeó por la victoria sobre los norteamericanos y dar paso a la realidad.

“El triunfo era para que los aficionados lo disfrutaran, pero ojo, vamos a Honduras a un partido difícil. Ya pasó lo de México. Ahora a descansar porque queda un partido difícil el miércoles”, destacó el defensor del Red Bulls de Nueva York, de la MLS.

Y tiene razón, puesto que el combinado bicolor, que según las publicaciones de los principales medios de comunicación hizo, ante los gringos, uno de los peores partidos de la hexagonal, tratará de recuperarse en su propia casa y ante su público. Además tratarán de dar un poco de alegría después del delicado momento que sufriera el país hace dos semanas cuando un terremoto dejó daños considerables en el país.

Algunos de sus jugadores ya comenzaron a hablar del tema. Tal es el caso de Carlos Pavón, quien aseguró que le dio mucho pesar haber quedado en deuda con sus compatriotas hondureños que vieron el partido desde la televisión y con los que llegaron en buena cantidad al Soldier Field, de Chicago.

“Pero desde ya esto queda en el pasado, además la eliminatoria es difícil (y nosotros) tenemos con qué ganarle a El Salvador”, consideró el delantero que ante Estados Unidos se vio limitado en su accionar debido a que no fue surtido de pelotas a lo largo del juego, tal y como se espera que no lo esté el miércoles.

El juego del miércoles entre las selecciones de Honduras y El Salvador fue catalogado como de alto riesgo por parte de la FIFA, señaló el oficial de seguridad designado por el ente rector del fútbol mundial, el guatemalteco Hugo Estrada, quien arribó ayer en la mañana a San Pedro Sula.

Según el delegado chapín, el estadio hondureño —el Olímpico Metropolitano, de San Pedro Sula— se encuentra en la mira de las autoridades, puesto que ya ha sido suspendido en ocasiones anteriores por el comportamiento de la afición. Por eso, el Estrada espera que lo que ocurra pasado mañana no tenga nada que reportar, comentó el oficial en el aeropuerto.

“Al momento que la FIFA envía un oficial para un partido eliminatorio como el del miércoles es porque es de alto riesgo. Esperamos que la afición hondureña se comporte a la altura para este duelo, recuerden que esta cancha ya fue sancionada en una ocasión”, señaló Estrada al periódico Diez a su llegada a tierras hondureñas.

Para el duelo entre la bicolor y la Azul se espera una asistencia de más de 25,000 aficionados al recinto, dado que la mayor parte de las entradas ya fueron vendidas en la preventa, que se efectuó hace tres semanas. Los hondureños esperan con ansias el juego.

“Siento a El Salvador un rival peligroso para cualquiera. Es un equipo que pelea de principio a fin. Carlos De los Cobos ha logrado darles un matiz de equipo.”

“Carlos De los Cobos le ha dado a El Salvador ese toque de distinción que más cuesta. El ha hecho que las individualidades de cada jugador funcionen.”

Es conocido en el ambiente futbolístico como “el Caballero de la Cancha”. Fue parte de la generación catracha que jugó el mundial España 1982 junto a Ramón “Primitivo” Maradiaga y otros.

En la hexagonal anterior estuvo como asistente en la selección guatemalteca que dirigió Maradiaga. Los dos estuvieron a punto de llevar al equipo chapín a su primer copa del mundo. El ex defensor catracho tuvo un paso por el balompié salvadoreño a finales de los ochenta con ADET.

En la actualidad, Gilberto Yearwood dirige en primera división del fútbol guatemalteco y conversó en exclusiva con LA PRENSA GRÁFICA del juego de este miércoles entre las escuadras de Honduras y El Salvador.

¿Cómo ve el juego de este miércoles entre El Salvador y Honduras en San Pedro Sula?

La verdad es que todos los juegos son difíciles. Así como México, Costa Rica y Trinidad y Tobago tienen lo propio, El Salvador también tiene lo suyo. Cada selección agota todos los recursos que le permitan alcanzar la clasificación.

Muchos hablan en Honduras de que la clave de los catrachos será hacer buena la condición de local. ¿Usted también lo cree?

Sí. Pero lo más importante de Honduras es que está bien dirigida y hay un ambiente de confianza hacia el trabajo. Hay un grupo que se ha propuesto darle la satisfacción a todo un país de clasificar al mundial.

¿Cómo ve esta selección hondureña en un análisis hombre por hombre?

Bien, a pesar de que en algunos puestos ha habido alguna escasez, pero las variantes que se ha implementado por parte del cuerpo técnico ha podido solventar esas limitaciones.

Honduras siempre se desinfla en las eliminatorias. ¿Qué hay detrás de eso?

Creo que hemos aprendido de las cosas del pasado, de las que no se han hecho. Ahora hay un comité de selecciones nacionales que está haciendo su trabajo. Hemos cometido errores en el pasado.

¿Hasta dónde se ha podido notar el retorno de Carlos Pavón a la selección hondureña?

Carlos es un líder. Él está en un momento álgido, es un jugador positivo como Amado Guevara, que son emblemáticos en la selección nacional.

¿Cómo ha visto el trabajo del técnico colombiano Reynaldo Rueda al frente de la selección catracha?

Tiene una buena camada de jugadores tanto con los experimentados y las nuevas incorporaciones. El equipo ha venido creciendo. Esa mezcla le ha venido bien a la selección.

¿Hoy por hoy Honduras es una de las mejores selecciones de la eliminatoria?

Pienso que estamos en el camino. Si no lo somos, creo que estamos cerca. Ya son dos años de trabajo con Reynaldo Rueda y el proceso no ha tenido interrupción. Ha habido continuidad.

Se dice que en Honduras hay un fenómeno en competencias eliminatorias en cuanto a que San Pedro Sula apoya más que la capital, Tegucigalpa. ¿Es cierto eso?

No, creo que todo va por etapas. La afición del norte es más entregada y fervorosa. Pero la única fase eliminatoria mundialista que ha ganado Honduras fue en Tegucigalpa. En el proceso anterior se jugó en San Pedro Sula y no se logró clasificar. La selección hondureña va a tener el apoyo a donde vaya. Pero ahora hay un ambiente más favorable en San Pedro Sula.

¿Qué ha logrado ver de la selección de El Salvador en los últimos juegos?

Me gusta mucho, ha mejorado mucho. No tiene aquellas figuras del pasado, pero tiene trabajo de equipo. Siento a El Salvador un rival peligroso para cualquiera. Es un equipo que pelea de principio a fin. Pero lo más importante es que Carlos De los Cobos ha logrado darles un matiz de equipo.

¿Dónde radica la diferencia de este equipo salvadoreño que dirige De los Cobos a los anteriores que ha tenido el equipo cuscatleco?

Él (De los Cobos) le ha dado a El Salvador ese toque de distinción que más cuesta. Él ha hecho que las individualidades de cada jugador funcionen.

¿Cree que ha cambiado el concepto del fútbol salvadoreño en la región luego del buen trabajo que ha hecho la selección cuscatleca en esta hexagonal de CONCACAF?

Creo que sí. Pero ha sido porque se lo ha ganado. Esta es una situación obvia. Las cosas a priori parecen fáciles. Muchos dicen que El Salvador está en la hexagonal porque le tocó un grupo fácil, pero no es así.

¿Cree que El Salvador podría ser complicado como visitante para Honduras?

Los partidos hay que jugarlos. Nadie gana los partidos sin antes haberlos jugado. Ese es un principio básico de respeto.

¿A qué selecciones ve usted en Sudáfrica 2010 por lo que ha observado hasta ahora en la hexagonal?

Creo que tenemos una selección y está bien dirigida. Pero aquí no hay que descartar a nadie. Estarán en el mundial las selecciones que hagan los méritos.

¿Cómo ve el cierre de hexagonal ante El Salvador en octubre de este año en el estadio Cuscatlán?

Hay una situación que es importantísima. Si El Salvador sigue como hasta ahora, donde ha peleado, va a ser muy difícil el cierre de esta eliminatoria.

¿Cómo ha visto a la selección mexicana de la actualidad?

México no ha arrancado bien. Ya en la etapa anterior tuvo problemas. Pero pienso que ellos van a ganar mucho con la llegada de Javier “el Vasco” Aguirre a la dirección técnica. Con su entrada han ganado credibilidad, que era algo que no tenían. Con la llegada de Aguirre se apagó aquel incendio que había. “El Vasco” ha generado una concertación positiva en México.

¿Qué le puede dar Javier “el Vasco” Aguirre a México, sobre todo ahora que están en la quinta casilla de la hexagonal con tan solo tres puntos?

Transmite muchas cosas porque cuenta con el apoyo. Eso hace que el jugador trabaje con mayor confianza.

“Al regreso de Honduras nos vamos a reunir en Casa Presidencial para reafirmarle el apoyo a De los Cobos. La gente lo pide y Carlos es un ídolo, es parte de la historia.”

“Sería ilógico que viniera otra persona a destrozar el proceso de Carlos. Por eso el presidente de la República va a sugerir que haya una continuidad para De los Cobos.”

Jaime “la Chelona” Rodríguez,presidente del INDES

El presidente de la República, Mauricio Funes, confirmó ayer que solicitará a la comisión normalizadora de la Federación Salvadoreña de Fútbol (FESFUT) que extienda el contrato al técnico mexicano Carlos De los Cobos. “No es algo que yo pueda imponer, pero ciertamente he expresado mi intención de solicitarlo a la comisión”, aseguró Funes.

El mandatario salvadoreño reveló, además, que ha invitado a De los Cobos a que visite Casa Presidencial el próximo viernes. En ese encuentro, señaló, Funes expresará al director técnico y a los jugadores que el Ejecutivo está dispuesto a apoyar a la absoluta de fútbol.

“Hasta ahora se ha acostumbrado dar incentivos económicos por goles o por triunfos, pero tras hablar con el ministro de Hacienda vemos que eso es difícil en estos momentos. Sin embargo, ofreceré todo mi apoyo al proceso de la selección”, comentó el presidente.

En similares términos se expresó el titular del Instituto Nacional de los Deportes (INDES), Jaime “la Chelona” Rodríguez, quien fungió como auxiliar técnico de De los Cobos.

“Al regreso de Honduras nos vamos a reunir en Casa Presidencial para reafirmarle el apoyo a Carlos De los Cobos. La gente lo pide y Carlos es un ídolo, es parte de la historia. Yo quiero mucho a De los Cobos. Con él aprendí muchas cosas”, manifestó “la Chelona”.

Hasta el momento, el mexicano no se ha detenido a analizar de forma profunda la posibilidad de renovar su vinculación con la Federación Salvadoreña de Fútbol. Su contrato termina a finales de este año.

El tema de la continuidad del mexicano tiene que ver con la elección de nuevas autoridades en la entidad federativa. La comisión normalizadora termina su trabajo este 30 de junio por disposición de FIFA. Rodrigo Calvo aseguró que no buscará la reelección en la presidencia.

Pese a los cambios de mando en la FESFUT, “la Chelona” cree que, llegue quien llegue la federación, tendrá que darle continuidad al trabajo de De los Cobos. “Acá sería ilógico que viniera otra persona a destrozar el proceso de Carlos. Por eso el presidente de la República va a sugerir que, sea quien sea el nuevo presidente de la federación, haya una continuidad para Carlos. La gente, el país lo van a pedir. Carlos ha demostrado que tiene capacidad con un grupo de jugadores humildes”, señaló Rodríguez.

El timonel azteca llegó al país en 2005. Luego de haber salido subcampeón con FAS en el Apertura 2006 regresó a México. En septiembre de ese año retornó para hacerse cargo de la Azul.

Antes de llegar al equipo asociado, la dirigencia federativa encabezada por Humberto Torres quiso contratar a De los Cobos, pero en ese momento, el timonel tenía otros compromisos laborales. La idea, en ese momento, era que se hiciera cargo de los equipos menores.

“Mi papá me dijo esta mañana (sábado): ‘El fútbol es caprichoso’, pero en este momento se hizo algo justo porque está demostrando su calidad”, dijo con enorme sonrisa la joven Paulina De los Cobos, al celebrar efusivamente el triunfo de El Salvador sobre México, en México.

La hija de Carlos De los Cobos, entrenador del combinado salvadoreño, disfrutó el partido junto a sus amigos, gozando de emociones encontradas.

Ante un grave abucheo, la rubia se arrancó a brincar en el primer gol de Julio Martínez, al minuto 11, lo que provocó que todo mundo la observara con rareza.

Pau se llevó las manos al rostro infinidad de veces durante la batalla presente. Estaba viviendo el choque que se disputó en el estadio Cuscatlán como si realmente estuviera ahí, junto al mexicano que, con rara suerte, defiende el azul del gremio centroamericano.

Pero la sonrisa de la ventaja, la hija de Carlos De los Cobos la cambió por lágrimas. En el penalti cobrado por Cuauhtémoc Blanco la tristeza y la duda la acogieron. Tomó una servilleta para secar sus mejillas y, ante todo, no le quedó otra más que seguir viendo la pantalla para aguantar con gallardía.

Tal y como se lo dijo horas antes su papá, el fútbol fue caprichoso y la balanza se inclinó a favor de El Salvador. El gol de Eliseo Quintanilla la paró de su silla una vez más. El tiempo pasó y la historia se escribió de mexicano a mexicano. La victoria se quedó para el enemigo del azteca, pero en Monterrey siguió festejando una seguidora del conjunto salvadoreño.

“Es que normalmente los penaltis los patea Cheyo o Pacheco. Estando Pacheco fuera, Cheyo es el indicado a cobrar. Siento que un penalti es una jugada particular.”

“No podemos ir a defendernos a Honduras porque el que sale a defenderse termina perdiendo el juego. No podemos ser un equipo que salga a defenderse.”

El seleccionador nacional Carlos De los Cobos está lleno de buenas vibras para afrontar el choque de la quinta fecha de la hexagonal ante Honduras.

Es muy seguro que la Azul ataque solo con Rudis Corrales ante los catrachos, pero eso no quiere decir que será 100% defensiva en su segundo juego de visita.

¿Cuál es su análisis en frío después de la victoria de 2-1 contra México?

Fue un juego difícil donde el control de la pelota fue alterno para los dos equipos. Creo que la virtud de la selección salvadoreña fue ser ordenada y sólida. Los muchachos se posicionaron bien dentro del terreno de juego y neutralizamos jugadores que eran importantes como Pável Pardo. Logramos explotar el control de la pelota. En términos generales fue un partido difícil, pero considero que El Salvador mereció el triunfo. Nos acercamos a la portería rival y supimos equilibrar los momentos de presión de parte de México.

¿Qué significó para usted haber derrotado a México después de haber defendido esa camisola en el mundial de México 1986?

Es una situación atípica, pero debo ser frío. Debo entender que yo no dejo de querer a mi país y a la selección mexicana que defendí en un mundial. Pero por otro lado se han generado otros sentimientos. Estoy en un país que me ha dado afectos, que ha creído en mí. Tengo que separar los aspectos laborales de los sentimentales, sino, no habría podido planificar mi trabajo adecuadamente. Tengo que ser fiel a mis principios y leal a la gente que ha creído en mí.

¿Cómo fue el reencuentro con Javier “el Vasco” Aguirre, su compañero de selección azteca en 1986?

Fue muy emotivo y me dio pena que él haya tenido que llegar hasta donde yo estaba. Yo lo estaba buscando y no lo encontré. Yo le di un abrazo y un beso porque es mi amigo y lo aprecio. Luego al final tuvo la caballerosidad de venir hasta donde yo estaba para felicitarme por el partido.

¿Qué le pareció el trabajo de jugadores como Cristian Castillo, que no tuvo el mismo rendimiento del juego contra Estados Unidos?

No estuvo en su nivel. Pienso que tuvo que batallar mucho en el trabajo contra Óscar Rojas, de México. No fue el jugador que ha sido normalmente; sin embargo, no jugó mal. Recuperó pelotas, pero no tuvo la profundidad acostumbrada. Es un jugador que fue muy estudiado, por eso le mandaron a Rojas.

¿Ya se había hablado de que Eliseo Quintanilla sería la primera opción en los tiros de penalti si los había?

Es que normalmente los penaltis los patea Cheyo o Pacheco. Estando Pacheco fuera del partido, Cheyo es el indicado a cobrar. Siento que un penalti es una jugada particular. Lo debe patear el jugador que se siente con la confianza para hacerlo pero dentro de la lógica, porque si un momento me dice Miguel Montes que quiere patear, no hay lógica.

¿Cómo ve el juego de este miércoles ante la selección de Honduras en calidad de visitante?

Honduras tiene buenos jugadores, por lo que será un juego duro, pero nada es imposible. Todo es posible si nosotros hacemos un buen trabajo y si somos un equipo sólido y buscamos atacar. No podemos ir a defendernos porque el que sale a defenderse termina perdiendo. No podemos ser un equipo que salga a defender cuando sabes que en tu área vas a tener gente fuerte y alta.

¿Entonces no vamos por un negocio a Honduras?

No vamos por el negocio, vamos a jugar y dependiendo de cómo vaya el partido, vamos a ir tomando decisiones. No nos vamos a meter atrás porque eso sería como un suicidio. Si pensamos solo en defender, vamos a acabar perdiendo.

¿Cree que es suficiente atacar con un solo hombre en punta como lo ha hecho en los últimos juegos?

Es suficiente entendiendo que en el medio campo tenemos jugadores como Eliseo Quintanilla, Cristian Castillo y Julio Martínez. De nada sirve que tengas dos o tres delanteros si solo uno de ellos es definidor.

¿Hemos superado el problema de escasez de gol en la selección nacional?

Vamos bien porque hoy tenemos seis goles. Hemos ido mejorando en la parte de producción de goles.

Por lo que ha mostrado la selección nacional en los juegos disputados en esta hexagonal, ¿se ve clasificado al mundial?

Yo sí tengo confianza en que lo vamos a lograr. México tuvo sus momentos buenos, pero fueron pocas sus posibilidades. Tuvimos neutralizado a un equipo que tiene jugadores con mucho más roce que los nuestros. La clave de nuestro equipo es el buen fútbol. La gente en México esperaba un equipo salvadoreño que se dedicara a dar patadas.

¿Espera un apoyo mayor de parte de la primera división de fútbol nacional para que el préstamo de jugadores para los partidos que restan de esta hexagonal sea más ágil?

Siento que dentro de todo hemos mejorado en ese aspecto. En un principio había mucha resistencia para ceder a los jugadores. En un principio no solo los clubes ponían resistencia para venir a la selección, sino que hasta jugadores. Hoy todos quieren estar acá. Eso es bueno porque se han motivado.

“Lo importante no es que nos conociera él (Faitelson), sino el verdadero mundo del fútbol, que nos conozcan los campeones del mundo. En Argentina y Brasil se habla de que le ganamos a México.”

“Es el narrador estelar de ESPN. Es salvadoreño. Es seguidor de la Azul. Y no dejó que un mexicano, su colega David Faitelson, se saliera con la suya al hablar sobre el equipo que el sábado pasado calló bocas y derrotó a un encumbrado México.

Fernando Palomo estuvo en el Cuscatlán y recibió una espontánea ovación por parte de la afición que, desde ya, lo considera un héroe cuscatleco.

¿Te imaginaste que la gente te iba a aplaudir en el estadio?

No, nunca, puesto que esto no es farándula, no es el mundo del espectáculo ni nada, esto es periodismo y hay espacio para una opinión y es el espacio para defender lo que es de uno, porque al país no lo van a tocar así no más. Al fútbol nuestro, pese a la poca historia que pueda tener, se van a referir con respeto.

¿Qué sentiste cuando te aplaudieron?

Un poco de vergüenza, la verdad. La gente está acostumbrada más al espectáculo y la misma profesión conlleva a esto. Uno narra partidos de fútbol y los narra con pasión y uno opina porque tiene el espacio para hacerlo y nada más. Me sorprendió muchísimo.

¿Cómo fue todo esto de hacer el programa “Cronómetro” con (David) Faitelson?

La televisión muchas veces se hace de casualidad y hay ideas que nacen de una discusión de café. Con David fue siempre de tirarnos piedritas para molestarnos, pero con buena onda sin ofender, aunque quien no nos conozca va a pensar que en cualquier momento salimos y nos agarramos a trompadas. Vinieron los productores y dijeron aprovechemos el partido El Salvador contra México y lo que hacen en el pasillo háganlo en la televisión. Lo que yo le dije es lo que siento y lo que él me dice es lo que siente.

¿Fuera de cámara, todo está tranquilo con Faitelson?

Sí, (David) Faitelson es tremendo profesional, tiene su opinión, su forma de ver las cosas, hay gente a la que no le gusta y otra que sí. La opinión y la forma uno siempre tiene que respetarla, él tiene una trayectoria larguísima, ha hecho muchas cosas en su carrera, es conocidísimo en México, ahora está pasando por el trauma (entre comillas) de que su imagen está en una señal fuera de México.

¿Habrá algún otro “Cronómetro” con Faitelson?

Habrá otro el lunes (hoy) y ya la selección habló por todos y no hay necesidad de decirle nada.

¿Crees que ya nos conoce?

Lo importante no es que los conociera él, sino el verdadero mundo del fútbol, que nos conozcan los que han sido campeones del mundo. En Argentina, Brasil y España ya se habla de que le ganamos a México.

Todo esto ha venido a reafirmar y que mucha gente sepa que eres salvadoreño, porque muchos piensan que sos argentino por el acento…

Pues, sí, es como sellar el pasaporte otra vez. En El Salvador no hice mucha carrera en deporte y si la hice fue poco vista porque nunca me dieron la oportunidad.

Iniciaste narrando fútbol americano y el fútbol fue poco…

No tuve la oportunidad porque ya había un equipo consolidado. Y bueno, esa oportunidad se me dio afuera.

¿Seguís esperando una oportunidad en el país?

Yo sigo creyendo que algo voy a hacer aquí en su momento, todavía no sé qué y esa oportunidad la veo lejos porque en términos profesionales, estoy en pañales y apenas empezando a gatear y voy a seguir creciendo donde estoy.

Volvamos a la selección. ¿Qué pensabas antes del partido El Salvador contra México?

Tenía la certeza de que de la selección algo podíamos esperar, independientemente del resultado, y era orden.

Que los jugadores de la selección interpretaran ya el sello que Carlos De los Cobos les ha heredado, nosotros siempre hemos querido creer que jugábamos a algo, pero nadie lo sabía interpretar. En una encuesta que hicimos con jugadores de distintas épocas preguntamos a qué juega la selección de El Salvador y a qué tiene que jugar la selección de El Salvador. Muchos decían ‘nosotros somos de toque corto a ras de piso y de combinación’. Otros decían ‘no, nosotros somos de fútbol de choque y de ir a pelear cada pelota y meter pierna’. Sí, pero eso era de los noventa. Ahora estamos teniendo éxito con esta selección y ese sello debe impregnarse en cada una de las categorías inferiores.

¿Por dónde crees que pasó la clave para ganarle a los mexicanos?

Yo creo que por la conciencia de saber que somos iguales que ellos, independientemente de enfrentar a uno que juega en Ucrania, en el Villarreal de España, otro que está en el Deportivo, en el América y otro que gana $2 millones al año.

Al final entraron a la cancha sabiendo que eran iguales y mejores que ellos. La personalidad es el trabajo que Carlos y el profe (Álvaro) Briones han hecho desde que han tomado el equipo.

¿Consideras que esta selección se merece un mejor trato?

Definitivamente. No puede ser que los bancos del estadio Cuscatlán sean de cemento, que nadie se queja como en Europa, que no hay certeza de donde van a entrenar todos los días. La comisión normalizadora cosa que agarra cosa que la convierte en…

A estas alturas del juego todavía no se habla de la continuidad de Carlos De los Cobos, ¿qué pensás al respecto?

Ahora es el momento de ofrecerle a Carlos, por el bien del fútbol, ampliar su contrato. Estamos ante la oportunidad de ofrecerle que se quede con un proyecto más amplio, con todos los poderes y con la posibilidad de que su familia se pueda venir a vivir acá.

El país ha recibido tanto de Carlos De los Cobos que ahora es justo que nosotros le demos algo a él.

¿Siendo realistas, ganarle a México no significa que estemos cerca del mundial, verdad?

No, para nada. Ganarle a México significa recuperar los dos puntos que la comisión normalizadora nos hizo perder contra Trinidad y Tobago. Porque nos hizo perder puntos Rodrigo Calvo porque nos puso entradas como si fuéramos a ver un partido en un estadio cinco estrellas. El estadio estaba vacío y con el ambiente que había ayer (el sábado ante México), los caribeños salen pidiendo que termine el partido y goleados.

Ahí caemos entonces a la cuenta de que cuando peor hemos estado administrativamente, pareciera que mejor nos has ido deportivamente hablando…

Carlos De los Cobos ha sabido canalizar la energía de los jugadores. En la selección demuestran que sí pueden. Esta gente (la comisión normalizadora de la FESFUT) se quiso lucrar en un partido pensando que iba a ser el único que nosotros íbamos a tener y se equivocaron.

¿Tras ver jugar a estos muchachos en la selección, crees que tienen oportunidad de prestar sus servicios fuera del país?

Sí, en la selección han tenido la oportunidad de mostrarse, hay gente que los ve. Ramón Sánchez, Cristian Castillo, Osael Romero, Rodolfo Zelaya, hay muchos jugadores que tienen posibilidades de irse al extranjero.

Se le ganó a México y ahora viene Honduras y será un partido difícil. Hay que sacar un buen resultado en San Pedro Sula y aprovechar que los hondureños no están bien anímicamente después de perder contra Estados Unidos…

Ahora (los hondureños) regresan con la presión de luchar, están necesitados y con un público confundido. Va a ser una de las pocas veces que nosotros llegamos a un partido contra Honduras con mayor confianza.

Vamos a jugar fuera las próximas tres jornadas, ¿cómo deben encararse estos juegos?

Primero debe pensarse en Honduras y después habrá tiempo de pensar en los demás partidos.

¿La afición puede soñar con la clasificación a un mundial?

Mientras los jugadores estén soñando en la clasificación al mundial, lo menos que podemos hacer es acompañarlos en ese sueño.

¿Vas a narrar algún partido de la selección nacional?

La verdad, me encantaría, pero donde trabajo ahora la empresa no tiene los derechos de transmisión de la selección ni de los próximos partidos tampoco.

Si volviéramos a jugar contra México el próximo domingo, ¿crees que le volvemos a ganar?

Le hemos ganado los dos últimos partidos a ellos, yo creo que les podemos hablar de cara a cara a los mexicanos.

¿Y en el estadio Azteca podemos ganarle a México?

Ahí juega la altitud, también jugarán los mismos que jugaron hoy (el sábado) o jugarán otros. Hay que darle a este equipo entrenamiento de altura y pensar en cada uno de los detalles. Que se suspenda la liga y que la selección juegue todos los fines de semana como se hacía en 1982.

En este tema está el problema estructural porque los dirigentes de primera división siempre van a querer su tajada…

Si los dirigentes tomaran en cuenta que jugando solo en el Nejapa, en el Firpo, en Vista Hermosa estos jugadores no tienen proyección. Que jueguen acá y que vayan a prepararse tres semanas en la altura porque también Estados Unidos nos va a recibir en la altura.

¿Fernando, sabés por qué no vino David Faitelson a El Salvador?

Imaginate si viniera, ¿qué pasaba?

Hoy la gente estará pendiente otra vez para ver qué le dices a Faitelson…

No, la gente debe poner la energía en apoyar a la selección el miércoles. El verdadero pleito de nosotros tiene que ser por reestructurar la dirigencia del fútbol, no contra otro país. Eso fue parte del folclor de un partido y hay que dejarlo atrás. Ahora hay que hablar de Honduras.

La derrota ante El Salvador por las eliminatorias de la CONCACAF dejó a México en el penúltimo lugar de la hexagonal final rumbo a Sudáfrica 2010; sin embargo, su técnico, Javier Aguirre, considera que la situación no es grave.

Los mexicanos sufrieron su tercera derrota en cuatro partidos y con apenas tres puntos solo superan a Trinidad y Tobago, su rival del próximo miércoles.

“Está complicada la situación, aún no es grave, ganando los seis (partidos restantes) vamos al mundial”, señaló Aguirre a su llegada a la Ciudad de México.

“El Tri” arrancó perdiendo a los 11 minutos, empató los ’69 y a cinco del final, un penalti cobrado por Eliseo Quintanilla le dio la victoria a los salvadoreños, que llegaron a cinco puntos para colocarse en el tercer lugar. El hexagonal es liderada por Costa Rica con 12 puntos, dos más que el segundo Estados Unidos.

“La derrota a falta de cinco minutos no me gusta nada, porque tampoco creemos que El Salvador fue superior a nosotros”, agregó “el Vasco”.

Aguirre fue contratado en abril pasado para remplazar al sueco Sven Goran Eriksson, cesado tras el mal paso del equipo en la fase de grupos y en el inicio de la hexagonal.

El ex entrenador del Atlético de Madrid, quien ya había sacado de un hoyo a México en las eliminatorias de Corea-Japón 2002, mantiene la calma dentro de la tormenta.

El Salvador está ubicado en Centroamérica. Al norte y noreste limita con Honduras, al oeste con Guatemala, al sur con el océano Pacífico. Su ave nacional es el torogoz, su idioma el español y su equipo, la Azul, dejó de ser, anoche, un desconocido para aquellos mexicanos que aseguraban que al istmo no tenían nada que venir a aprender. Humildad quizás.

Alexander Escobar no juega en el Shakhtar de Ucrania, Julio Martínez no presta sus servicios al Deportivo La Coruña de España y Rodolfo Zelaya no está en el Fire de la MLS. Pero ayer, esos tres hombres, junto a ocho —incluidos tres suplentes— auténticos guerreros más se encargaron de demostrarle a propios y extraños que poco o nada importa que el número 100 del mundo se mida ante el número 26 del raramente creíble ranking de la FIFA. Le demostraron a esos pretenciosos norteamericanos que hacen de los gritos su mejor arma para tratar de ocultar su ignorancia, que este paisito sí existe, que el Cuscatlán es más que un pequeño estadio de la región y que, sobre todo, esta nación no necesita de mascarillas para taparle la boca a nadie.

Anoche, un México plagado de nombres, de figuras, de contratos millonarios, se fue del Cuscatlán —igual que en 1993 y con un idéntico 2-1— con la cola entre las patas. El mismo Martínez y Cheyo Quintanilla sentenciaron un juego que volvió a reunir en “el Coloso de Montserrat” a un país entero ávido de satisfacciones, ávido de revancha ante un rival que, como siempre, se llenó la boca de desprecios hacia los salvadoreños.

Los azules vienen de equipos como el Águila, el Vista Hermosa, el Nejapa, el Firpo. ¿Y? Y son dirigidos por un mexicano que, según un bocón, no tuvo éxito en su país. Pero Carlos De los Cobos, un azteca de pura cepa, derrotó al “Tri” con aplomo, ganándole la partida táctica a su “brother” Javier Aguirre, quien no pudo debutar con una victoria en su nueva aventura con el equipo norteamericano.

De los Cobos le volvió a apostar a sus hombres. A esos que tienen, hoy más que nunca y tras el tercer lugar con el que amanecieron ubicados hoy en la tabla de posiciones de la hexagonal final de la CONCACAF, vivo a un país que aspira que Sudáfrica 2010 se convierta en la tercera travesía mundialista de su historia.

El míster envió un 4-1-4-1 que se comió vivo al 4-4-2 que le plantó “el Vasco” sobre el pasto del Cuscatlán.

Sí, hubo nervios de entrada, de los dos lados. Pero la visita comenzó dominando. En los primeros siete minutos de juego ya “el Mudo” Montes había sido puesto a prueba en un par de ocasiones.

Pero cuando la tricolor era mejor, apareció Julio Martínez, tras una jugada para enmarcar de Rodolfo Zelaya, y con un zapatazo de tres dedos la puso lejos de la estirada del veterano “Conejo” Pérez.

Apenas se habían jugado 11 minutos y la hinchada cuscatleca, que llenó desde el mediodía —sin armar relajos y aguantando estoicamente primero el inclemente sol y luego la fuerte lluvia— el estadio, ya saboreaba una victoria.

Pero no era de soplar y hacer botellas. Hubo que anular, por ejemplo, a Andrés Guardado por la izquierda y arriba a Nery Castillo y al “Guille” Franco. Había que detener a Pável Pardo y Gerardo Torrado por el centro, y había que incomodar a Galindo y al “Maza” Rodríguez en la zaga. Y todo se logró.

Al descanso todos se fueron conteniendo la respiración. Y así se inició el complemento. Sobre todo porque llegó al terreno de juego el polémico Cuauhtémoc Blanco en lugar de Pardo, en clara intención del “Vasco” de darle más llegada a su equipo.

Y lo logró. “El Tri” arrinconó a la Azul. Pero no empataba porque atrás Alex Escobar y Marvin González jugaron el partido de su vida. Y Montes estaba atentísimo a cada balón aéreo que buscaba la testa de Franco.

Corría el minuto 68 y la lluvia hizo su aparición sobre el cielo salvadoreño. Y el agua también trajo el empate azteca luego de que el tico Walter Quesada decretara penalti tras una dudosa falta de Manuel Salazar sobre “el Guille”.

Llegó “Temo” a cobrar y con tiro hacia la izquierda burló la estirada del “Mudo”. Era el 1-1, pero el apoyo de la afición no se vino a pique. Al contrario, y a pesar de que México siguió creciendo, la hinchada siguió jugando su papel. Y tuvo su recompensa.

Llegó Rudis Corrales en lugar de Pacheco y el delantero de Águila comenzó enchufado. Las corrió todas arriba cuando el esquema de De los Cobos ya había sido modificado al 3-5-2.

México, de la mano del veterano Blanco y apelando a su mayor oficio, le quitó la pelota a El Salvador. Pero de nueva cuenta, cuando la visita era mejor, cuando tenía arrinconada a la Azul, una corrida de Julio Martínez por derecha provocó el que, a la postre, sería el gol de la victoria salvadoreña.

Dentro del área azteca Martínez tiró el centro corto que chocó en la mano de Rojas y Quesada, sin dudar, decretó el penalti. Minuto 85, 1-1 y un estadio hirviendo. Cheyo Quintanilla —con el temor natural de cualquier aficionado recordando lo que le pasó ante Costa Rica cuando erró su lanzamiento— pidió la pelota, se paró frente al “Conejo” Pérez, finteó al meta mientras la pelota iba hacia el lado izquierdo de la meta tricolor.

Gol. Histeria. Cinco minutos más. Victoria. Sí, la sexta victoria de la historia de la Azul sobre “el Tri”. El Salvador le ganó a México. Seguro que hoy sí conocen de este paisito en medio mundo.

El técnico mexicano tuvo que arriesgar en la segunda parte con la experiencia de Cuauhtémoc Blanco. Lo mandó al campo y fue el que puso la pelota al piso porque los aztecas no lo habían podido hacer durante toda la primera parte donde el equipo salvadoreño había hecho su juego a su antojo. No tenía obstáculos.

Blanco fue hacia el frente y se acompañaba bien con los hombres de media cancha. Tuvo que salir Pavel Pardo, quien no estuvo en su noche pese a ser jugador de renombre. Nunca le dio esa llegada que necesitaba el equipo azteca.

Con su experiencia, Blanco llegó a la cancha y marcó el tanto de México. Se paró con frialdad y engañó a Miguel Montes Moreno.

Esa fue la única modificación que le dio resultados a Aguirre.

Se metió en el juego

“El Vasco” le dio trabajo a los árbitros, sobre todo al administrativo, quien siempre estuvo atento para que no se saliera de la zona técnica.

Al final del choque se metió a la cancha para evitar que Blanco reclamara de forma airada a los árbitros. Admitió la derrota y saludó a todo sus jugadores. Tuvo un debut amargo en el Cuscatlán.